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Toluca, Méx.- “No importa lo que tengamos que hacer para acercarnos a la casa de dios”, coincidieron algunos de los feligreses católicos que acudieron a misa en la Catedral de Toluca.
Todos, antes de ingresar hicieron fila, portaron el cubre bocas, se dejaron tomar la temperatura, usaron el tapete sanitizante y al interior sólo ocuparon los lugares marcados en las bancas.
En las misas no hay saludos de la paz con la mano y tampoco se escuchan los tradicionales cantos que acompañan la oración durante la ceremonia, pero los asistentes se dijeron satisfechos de poder volver a misa de forma presencial y “recibir la bendición dentro de la casa de Jesucristo”.
“¡Bendito dios! ya podemos volver y creo que como buenos fieles debemos estar dispuestos a hacer lo que sea a cambio de que nos permitan entrara a orar y estar con dios un momentito en su casa”, dijo la señora Juana Cruz Dávila.
Algunos de los asistentes a los recintos religiosos no están del todo de acuerdo con la reapertura, incluso dicen, no debieron abrir las iglesias ni transitar al semáforo naranja, pues temen que sean altos los contagios del SARS-CoV2; sin embargo, acudieron con su abuelita, su mamá o tías, que querían asistir a la misa cuanto antes.
“No estoy de acuerdo porque debieron mantener cerrado, porque realmente el virus se sigue expandiendo y las autoridades deberían acudir a los hospitales para palpar la realidad. Los feligreses deberían quedarse en casa, porque al final se dice que dios está en todas partes, no tenemos por qué ir a un templo a adorarlo, sino sencillamente elevar una oración desde nuestros hogares”, apuntó Rogelio Taviz.
Para los encargados en las iglesias de medir la temperatura, dotar el gel y asegurar que los asistentes usan el tapete sanitizante iniciaron una semana de reactivación en la que hasta el momento no se han encontrado personas renuentes a las normas.
“En todo momento nos dicen que sí, incluso nos preguntan si puede entrar una familia completa, por ejemplo, y les explicamos que sí pero deben sentarse lejos, respetar los espacios vacíos y no hay problema. No hemos visto rechazo de nadie”, añadió una de los responsables en la Santa Veracruz.
En las iglesias hay una sola puerta de entrada y otra de salida, en todas colocaron unas vinilonas impresas con las instrucciones, no se entregan cuadernillos con las oraciones y no hay agua bendita.
Por su parte, el coordinador municipal de Protección Civil y Bomberos, Hugo Antonio Espinosa Ramírez informó que se reunirá con líderes eclesiásticos para iniciar con una verificación aleatoria de las iglesias y verificar que cumplan con el aforo señalado, aunque se dará prioridad a quienes por iniciativa propia soliciten el autodiagnóstico de sus templos.