Toluca, Méx.— Los dos jóvenes que pidieron una foto al exalcalde de Valle de Chalco, Francisco Tenorio Contreras, antes de que uno de ellos lo asesinara, trabajaban con grupos de narcomenudistas o “tiradores de droga” en la zona, confirmó el titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), Alejandro Gómez Sánchez.
En entrevista, el funcionario mexiquense se rehusó a brindar más detalles sobre este caso, para no perjudicar la indagatoria, y rechazó señalar las líneas de investigación sobre el posible móvil, porque “realmente entorpecería el trabajo” desempeñado hasta el momento.
Gómez Sánchez aclaró que quiere esperar a tener a los autores materiales de este homicidio, quienes darán claramente la información acerca del responsable de ordenar el asesinato del exedil morenista.
Además, precisó que la fiscalía a su cargo cuenta con una orden de aprehensión en contra del líder de los jóvenes que se tomaron la fotografía con Tenorio, uno de ellos señalado como el responsable de accionar un arma a bordo de la camioneta del edil, en donde también resultó lesionado el secretario particular Carlos Alberto Arellano.
Francisco Tenorio murió el sábado pasado, luego de permanecer internado cinco días en el Hospital de Alta Especialidad de Ixtapaluca tras recibir un impacto de bala en la cabeza, por un muchacho que previamente le solicitó tomarse una fotografía, cuando el exalcalde terminó un recorrido por la unidad habitacional Geo Villas Asunción.
De acuerdo con la cronología de los hechos que relató el fiscal General de la entidad, el día del atentado el expresidente municipal de Valle de Chalco, tras concluir una reunión con habitantes de la localidad la mañana del martes 29 de noviembre, accedió a retratarse con dos jóvenes que lo abordaron para solicitarle que se tomara una fotografía con ellos, en la calle Bahía de Todos los Santos.
Más tarde Tenorio Contreras le dio un aventón a bordo de su camioneta a uno de ellos, tras topárselo en la calle, minutos después este joven accionó un arma en su contra, hiriendo también al secretario particular.
Inicialmente fueron trasladados por el chofer del edil, a bordo de la unidad en la que circulaban, a un hospital en Chalco, donde no los pudieron atender debido a la gravedad de las lesiones que presentaban, razón por la que los remitieron vía aérea a uno de alta especialidad.
Días después su familia decidió donar sus órganos y horas más tarde murió.