El pleno del Congreso capitalino aprobó el dictamen que crea la Ley de Economía Circular de la Ciudad de México , que busca pasar del modelo de “tomar-hacer-usar-desechar” al de eliminar residuos, contaminación y mantener productos y materiales en uso el mayor tiempo posible.
Esta nueva ley señala que la economía circular es el modelo económico de producción y consumo sostenible que contempla todas las etapas del ciclo de vida de los productos y servicios, para generar diseños y esquemas que disminuyen los impactos ambientales , a través de ciclos técnicos y biológicos que posibilitan la permanencia y reintegración sustentable de sus componentes.
Se busca, entre otras cosas, promover entre los habitantes de la Ciudad de México la adopción de hábitos de consumo responsable; incentivar acciones de producción sostenible a través del rediseño, reducción, reúso, reparación, restauración, remanufactura, readaptación, reciclaje y recuperación, entre otras; y fomentar modelos de negocio sostenibles en los que se minimicen los posibles impactos al ambiente, facilitando que la población pueda lograr la satisfacción de sus necesidades sin que sea indispensable la compra, venta o posesión de un bien.
Asimismo, se busca poner a disposición de la población información sobre economía circular, que contribuya a contrarrestar y desincentivar prácticas de publicidad engañosa; fomentar la vinculación y participación de la sociedad civil organizada y la academia con los sectores público y privado, para realizar la investigación y potenciar la innovación de tecnología e infraestructura relacionada con la producción y consumo responsable; y fomentar la revalorización de los productos y materiales para evitar que se conviertan en residuos, y reducir el consumo de agua, energía y recursos naturales.
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Asimismo, se prevé que las empresas tengan un “distintivo de circularidad”, colocándolo de manera visible en los procesos, productos y servicios evaluados, previa autorización de la autoridad correspondiente, esto siempre y cuando las empresas se hayan sometido a la Evaluación de Circularidad y cuenten con los niveles de cumplimiento que para tal efecto se establezcan.
Al argumentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Desarrollo Económico, la priísta Silvia Sánchez Barrios , señaló que actualmente tenemos un modelo de economía lineal, que se concentra en “extraer, producir y desechar” diseñado para producir lo efímero y desechable, afectando así negativamente al equilibrio ecológico.
Apuntó que el modelo de economía circular se basa en tres principios: eliminar residuos y contaminación; mantener productos y materiales en uso el mayor tiempo posible; y regenerar los sistemas naturales.
Por lo anterior, dijo que la economía circular plantea un enfoque completamente distinto que permite estimular el crecimiento económico y generar empleo sin comprometer al medio ambiente, posicionándose como piedra angular para una recuperación económica resiliente y con bajas emisiones de carbono, tras la pandemia de Covid-19.
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“Si cambiamos la forma en que producimos y utilizamos el acero, el cemento, el aluminio y el plástico, se estima que se podrían reducir las emisiones de gases de efecto invernadero provenientes de estas industrias hasta en un 40 por ciento para el 2050”, apuntó.
La secretaria de Medio Ambiente de la Ciudad, Marina Robles , acudió al Congreso para atestiguar la aprobación de este dictamen.
Al respecto, el legislador de Morena, Fernando Mercado , expuso que este dictamen se construyó mediante el parlamento abierto, para lo cual, se convocaron a dos foros de discusión en enero y junio de 2022, en el que expertos en temas ambientales, representantes de cámaras empresariales, académicos, representantes de organizaciones de la sociedad civil y personas funcionarias públicas, dieron su punto de vista, debatieron y complementaron el documento, lo cual, convierte la Ley de Economía Circular “en una de las primeras leyes locales ambientales construidas con la participación de todos los sectores sociales”.
“Este Gobierno le apuesta a proyectos ambientales como la planta de concretos sustentables mexicanos, en la que reciclan cascajo, para posteriormente usarlo como materia prima en banquetas y obras públicas. La Ley motivará a las Alcaldías a adoptar este tipo de compras”, sostuvo.
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