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Toluca, Méx.— En el Estado de México 2 mil 761 conductores de transporte público como taxi, minivan, autobús, camiones o microbuses, dieron positivo a las pruebas toxicológicas y de alcoholemia que aplicó la Secretaría de Movilidad entre septiembre de 2011 y enero de 2019 en todo el territorio mexiquense, la mayoría a cocaína y marihuana, según datos proporcionados por la dependencia.
Los municipios que concentran las estadísticas son Naucalpan, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Chalco, Atizapán, Tecámac, Toluca y Tultitlán.
Entre el 17 y el 29 de enero del 2019, la SEMOV aplicó 743 pruebas: 129 en Atizapán, 100 en Chalco, 13 en Ecatepec, 155 en Naucalpan y 346 en Tlalnepantla, y en esos siete operativos itinerantes, en esos resultados positivos, 10 de los conductores arrojaron haber consumido cocaína, cinco mariguana, dos rebasaron los índices de alcohol y dos más consumieron bezodiacepina, que es un ansiolítico.
Esta estrategia implementada por la SEMOV forma parte de las medidas preventivas de delitos cometidos por los choferes y de accidentes provocados por conducir bajo el influjo de drogas las unidades de transporte público.
En estas mediciones participa también la Secretaría de Seguridad, son itinerantes y utilizan el factor sorpresa, para que los choferes no se adviertan sobre el retén de autoridades que les aplicará la prueba, informó la dependencia mexiquense.
Personal de las unidades de medición platicaron que se instalan desde las primeras horas del día, en vías de mayor circulación, y de forma aleatoria eligen a quienes les aplicarán la prueba; de ser negativo el resultado, pueden continuar su camino.
Derivado de las 579 mil 429 pruebas aplicadas desde hace nueve años, fueron canceladas 517 licencias a operadores de transporte público.