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Toluca, Méx.— En demanda de protocolos de seguridad efectivos, la creación de un mapeo de sitios de riesgo apegado a la realidad y una verdadera atención a las denuncias sobre acoso, violencia sexual, así como delitos al interior de las instalaciones de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), un grupo de estudiantes feministas tomaron el edificio de la Rectoría por cerca de cuatro horas.
La protesta, que inició como una marcha para exigir justicia por el feminicidio de la maestra de danza Sonia Pérez Rodea, quien fue localizada estrangulada en los baños del Teatro de los Jaguares, escaló hasta que cerca de 500 alumnos y alumnas entraron por la fuerza al edificio ubicado en el centro de Toluca.
Las estudiantes demandaban la presencia del rector Alfredo Barrera Baca para exponerle sus demandas, especialmente porque no sólo se trata de un feminicidio, sino de una serie de crímenes al interior de las instalaciones universitarias en diversos municipios del estado, que son desestimados por las autoridades de la máxima casa de estudios, pues “los califican como hechos aislados, ajenos a la comunidad, o no son considerados para que mejoren los protocolos de protección a la mujer”.
Con pancartas, mantas y pintas en el exterior del edificio administrativo exigían la presencia del rector, quien nunca se presentó.
Cerca de las 13:30 horas acudieron al acceso principal del edificio la secretaria de Rectoría, Janeth Valero Vilchis, y el abogado General, Raúl Ortiz, así como el director General de Comunicación Universitaria, Gastón Pedraza, para atender a las manifestantes; detrás de la reja que mantenían custodiada los elementos de seguridad de la institución, escucharon las demandas.
Los alumnos pidieron abrir las puertas del edificio bajo el argumento de que no se trataba de vándalos ni delincuentes, sino de un grupo de alumnos, “tienen más cuidado con las paredes que con los alumnos y maestros”; sin embargo, las puertas permanecieron cerradas.
Alrededor de las 14:30 horas, ante la negativa del rector de atenderlos, a patadas y jalones un grupo intentó abrir las puertas de herrería, pero sólo logró abrir el acceso a unas oficinas contiguas, por donde ingresó al patio central y al aula magna.
Ahí realizaron una asamblea y reiteraron que se presentara el rector con su gabinete, antes de las 18:00 horas, para entregar el edificio.
Las alumnas instalaron una ofrenda en honor a las víctimas de feminicidio, entre ellas la docente adscrita a la Secretaría de Cultura universitaria, y a las 17:30 horas salieron a recibir a los representantes de la UAEMéx.
La secretaria de Rectoría se comprometió a sostener con el grupo de feministas una reunión en los próximos días, en donde estará presente la mayor parte del gabinete, aunque explicó que aún valoran si asistirá el rector Alfredo Barrera Baca.
Expresó que la institución desconocía sobre la denuncia que interpuso la maestra Sonia por violencia familiar, pues de lo contrario habría establecido medidas de seguridad extraordinarias y enfatizó que no fueron omisos en materia de seguridad ni en la atención de la demanda de la comunidad por mejorar el resguardo de las alumnas.
“Tenemos un mapeo y lo trabajamos con instancias de seguridad externas e internas (...). Hemos recurrido a las autoridades municipales para tener el apoyo”, enfatizó.
