El balón gigante de ocho metros de alto colocado frente a la escultura urbana de las Torres de Satélite, declaradas monumento artístico de la nación, contamina visualmente la obra de Luis Barragán y Mathias Goeritz, señalaron colonos de Ciudad Satélite y La Florida, así como por la asociación civil Fomento Cultural Torres de Satélite, quienes piden sea retirado de la explanada de este conjunto escultórico.
Esta semana empezó la colocación del balón gigante, uno de tres pelotas de ocho metros de diámetro que fueron colocadas en PeriSur y en el Monumento a la Revolución, con motivo del mundial de futbol de Qatar 2022, cuya colocación en las Torres de Satélite “contó con los permisos correspondientes incluso del INBA”, para permanecer en esta explanada un mes, afirmó uno de los integrantes de la empresa que lo colocó en entrevista con EL UNIVERSAL.
No cuenta con permiso
Cuauhtémoc Rodríguez Gracia, presidente de la asociación Civil Fomento Cultural Torres de Satélite denunció que la colocación del balón gigante, “no cuenta con autorización del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) o de alguna autoridad competente en la salvaguarda de este monumento artístico declarado el 21 de noviembre de 2012, como Patrimonio Artístico de la Nación”.
La Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas protege en un radio de 500 metros esta escultura urbana, señaló Rodríguez Gracia y los dirigentes vecinales de Ciudad Satélite en carta dirigida al secretario Luis Gilberto Limón, secretario de Movilidad del Estado de México, hasta hace poco secretaría de Comunicaciones mexiquenses.
En tanto el balón gigante que cuenta con un diámetro de 8 metros, es visible y llama la atención de automovilistas y pasajeros que transitan por Periférico Norte rumbo al Norte.
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