Amanalco, Méx.— Con ráfagas de armas largas, un grupo delictivo obligó a detenerse, la madrugada de este lunes, a seis tripulantes de un auto compacto color rojo, así como a un motociclista, en las inmediaciones de la carretera Toluca-Valle de Bravo, quienes fueron acribillados, informaron autoridades mexiquenses.
Los cuerpos de las siete víctimas, hallados en un paraje boscoso de la comunidad de San Lucas, cercano a la carretera Toluca-Valle de Bravo, fueron trasladados a instalaciones de la Coordinación General de Servicios Periciales, donde personal especializado de diversas áreas realizó un análisis para identificar a los fallecidos y revisó los indicios en la escena del crimen para ubicar a los agresores, informaron autoridades de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
Esto, luego de que la madrugada del lunes en la desviación a Rincón de Guadalupe, en la comunidad de San Lucas Primera Sección, pobladores de Amanalco reportaron una intensa balacera.
Cinco cuerpos quedaron junto a un automóvil rojo tipo Sentra Nissan con placas del Estado de México; otro estaba dentro del vehículo, y uno más a unos metros del lugar en un barranco, quien habría sido ejecutado cuando iba en una motocicleta tipo Italika.
Las víctimas, en su mayoría jóvenes, habrían sido rafagueadas con armas R-15. El automóvil en el que viajaban seis de los fallecidos presentaba, al menos, 35 impactos de bala en su parte frontal, además de que los laterales y parte trasera quedaron con el medallón y los cristales de las ventanas rotos.
Además, el motociclista fue acribillado cuando, al parecer, sólo pasaba por el lugar ubicado a unos 100 metros de la carretera Toluca-Amanalco-Valle de Bravo, en la entrada hacia Rincón de Guadalupe.
Al punto del ataque llegaron más de 60 elementos de la Secretaría de Marina, de las policías municipal y del Estado de México, así como agentes de investigación y peritos de la fiscalía mexiquense y Ministerio Público, quienes iniciaron una investigación por este hecho.