La secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, dijo que ayer en la alcaldía Azcapotzalco una persona que recibió la vacuna de Pfizer contra el Covid-19, horas después murió por un infarto ; sin embargo, tras un seguimiento epidemiológico se pudo confirmar que la inoculación no fue la causa.
“Ayer se reportó (alguna situación adversa) que podría estar asociada a la vacuna, pero se descartó, esa persona si fue vacunada pero después de un cierto tiempo que salió de la observación cuando llegó a su casa se quedó dormida y falleció ”.
En conferencia de prensa, López Arellano mencionó que se realizó una investigación epidemiológica inmediata y se pudo saber que la persona tenía una enfermedad cardiaca grave, hipertenso y diabetico, incluso que su cateterismo había sido pospuesto por no estar en condiciones.
“Los adultos están muy frágiles y muy enfermos y muchas veces puede concebir un evento y no estar relacionado (a la vacunación)”, añadió que se le dio el seguimiento epidemiológico al marcar al 911 para descartar que estuviera asociada a la vacunación y que incluso se le tomó una muestra para descartar coronavirus la cual fue negativa.
La secretaria de Sedesa explicó que a lo largo de las jornadas de vacunación en la capital del país se han registrado 10 eventos de dolor en brazo y articulaciones entre los adultos mayores pero que no han requerido hospitalización.
También lee:
Lo que sabemos de la vacuna de Pfizer
La pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 y la enfermedad que genera, el Covid-19, orillaron a los expertos y sus laboratorios a realizar diversas curas contra el malestar que ha cobrado la vida de más de 2.6 millones de personas. Ante ello, la vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech sorprendió debido a sus características.
El desarrollo de esta cura fue una de las primeras en llegar a la tercera fase y última en los procesos de investigación, que es la aplicación de la inyección que a lo largo de los meses ha significado una esperanza para los miles de enfermos que están alrededor del mundo.
Lee también Así es la vacuna de Pfizer
Con la primera dosis de la vacuna se obtiene, de dos a cuatro semanas, un 85% de eficacia: "De dos a cuatro semanas después de la (primera) dosis hay ya un fuerte índice de eficacia, con una reducción del 85% de los casos sintomáticos", resumió Gili Regev-Yochay, coautora de un estudio que se llevó a cabo para medir la eficacia de la fórmula de Pfizer.
lr / rdm