Cada producto que se pone a la venta lleva una historia, una forma de expresarse y de tener un sustento para los 6 mil internos del Sistema Penitenciario, quienes, a través de la marca Hazme Valer, han encontrado una puerta no sólo para la reinserción, sino también para poner a la venta sus productos.
A través de esta marca, la Subsecretaría del Sistema Penitenciario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) lleva piezas únicas que se hacen en los penales para ponerlos a la venta al público en dos tiendas registradas.
Hazme Valer fue registrada en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) para que sea ya una marca oficial de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario.
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Actualmente, la población penitenciaria es de 26 mil personas privadas de la libertad, de las cuales 16 mil tienen un trabajo, y de ese número, 6 mil venden sus productos.
El Basílico, interno en la Penitenciaria, y los ingenieros y arquitectos presos en el Reclusorio Oriente llevan a esta tienda réplicas detalladas, de la Basílica de Guadalupe. También hay tallados en madera, obra de otros artesanos, el Metrobús, Cablebús y Metro, que se venden como juguetes al público. Libretas, vasos, ropa, muebles, sillas Acapulco, todo hecho a mano en las cárceles capitalinas. Los precios cada uno de los internos los pone, son accesibles, pero con base en su trabajo.
El 13 de septiembre, la SSC abrió su tienda más grande al interior del Museo del Policía, ubicado en la calle Victoria 82 en el Centro Histórico.
Nahum Román Mendoza Roldán, director ejecutivo de Trabajo Penitenciario del Sistema Penitenciario, dijo a EL UNIVERSAL que hay más de 500 productos realizados por los internos, que se hacen en tres formas de laborar.
Explicó que los internos realizan trabajo para la institución, como purificar agua, hacer pan, entre otras; trabajo a cuenta de terceros, y el autoempleo, este último es el que se vende en la tienda oficial.
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Todos estos productos también dejan ver una red de apoyo, la cual no sólo viene de los familiares o de la misma secretaría, sino que se tejieron en otras instituciones.
Ejemplo de ello es que jueces del Poder Judicial capitalino han mandado a pedir gaveles o martillos de la justicia, los cuales son hechos por los presos con las características oficiales. O en el caso de la fiscalía capitalina, han solicitado “figuras anatómicamente correctas”, muñecos tejidos que se usan para detectar si los menores fueron víctimas de algún delito sexual.
“Lo que hacemos es capacitar a las personas privadas de la libertad, darles un proceso de capacitación y posterior a eso darles un proceso de especialización. A qué vamos con eso, a que nosotros nos valemos de otras instituciones, nos mandan cursos (…)”, comentó.
Las principales capacitaciones son en carpintería, herrería, pintura, grabado, tejido o crochet, principalmente realizado por las mujeres en Santa Martha.
No sólo eso, hay cinco huertos en diferentes centros y ellos venden sus plantas, cactus, suculentas, cactáceas, en macetas, y para festividades como el Día de Muertos ya están listos las cempasúchil.
“¿Qué es lo que innova la Secretaría de Seguridad Ciudadana? Uno, es darle identidad, generar la marca institucional que es una cuestión importante, pues les da una identidad a ellos, a través de una frase, Hazme Valer, que para ellos representa mucho. Para ellos, Hazme Valer es ayúdame, confía en mí. La Ciudad de México es la primera que hace esto”, explicó.
Entre otros artículos está la poleana, este juego que se inventó en las cárceles. Otros tienen la participación de varias manos, como, por ejemplo, muebles o productos agrícolas.
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Pagos y ganancias
Las personas que adquieran algún producto pueden hacerlo a través de tarjetas bancarias o en efectivo; cada 15 días se hace un corte de lo vendido, ese dinero entra de manera directa al área de finanzas de la SSC, que realiza un cheque a los enlaces administrativos de cada uno de los centros penitenciarios, y ya de ahí se les hace el pago a los internos.
Nahum Román Mendoza hizo el llamado a los capitalinos para que vengan a comprar estos productos, pues hay textiles, bolsas, figuras a precios accesibles. “Crean en ellos, al final del día es una cuestión que a todos nos atañe, es una política de reinserción, una cuestión de una segunda oportunidad, eso nos ayuda porque es prevención al delito”.
Hazme Valer abre de lunes a viernes de 9:00 a 15:00 horas y sábado a domingo, de 10:00 a 17:00 horas; se ubica dentro del Museo del Policía. También cuenta con un catálogo en línea en la página de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.