En este #ViernesDeGarnachas te traemos uno de nuestros antojitos favoritos de la Ciudad de México, porque sabemos que como buenos mexicanos, nadie se puede resistir a un glorioso bocado de la tradicional comida de las calles.
En la variedad está el gusto
Las gorditas son uno de esos platillos que puedes comer a cualquier hora, pero a nosotros en particular nos parece el desayuno ideal para llegar al trabajo llenos de energía, con el estómago contento y tal vez, alguna mancha de salsa en la ropa que no será de importancia después de darle gusto al paladar.
En gustos de garnachas se rompen géneros, pero una de las más democráticas son las gorditas .
Foto: @pastorygrill
Pueden estar hechas con masa de maíz amarillo o azul, con textura más tersa o un tanto martajada, de exterior suave o más bien tostadas, además de que pueden estar hechas con chicharrón prensado o frijol y para terminar, se abren para recibir un par de cucharadas de nopales preparados, queso y salsa, ya si el hambre (o el antojo) traiciona, los guisos entran al quite para convertirlas en una comida completa.
Las mejores garnachas están cerca de una estación
A tan solo un par de cuadras del metro Centro Médico, se encuentra un pequeño puesto que ha logrado dominar el arte de hacer gorditas , además de otro tipo de antojitos como quesadillas, sopes, tlacoyos y tacos.
Sobre la calle de Tehuantepec , casi esquina con Ures, en la colonia Roma Sur, se encuentra un comal en el que se preparan estos productos de masa para alimentar a los transeúntes que pasan por ahí en su ida o regreso del transporte público.
Foto: @jairopelcastre
Puedes ubicarlas porque se encuentran a unos pasos de la tienda de abarrotes “El Cañón”, donde puedes pasar por una bebida para bajar la comida o por el postre después de echar tus garnachas . Si tienes duda, fíjate que sea donde utilizan masa de maíz azul, eso las distingue de las demás del rumbo.
La orden perfecta
La recomendación es la gordita de chicharrón , no hay pierde. Son amplias y delgaditas, por lo que se cocinan rápidamente, dando oportunidad a que el exterior quede bien dorado.
Foto: Kimberly Flores
Las manos hábiles que les dan vuelta en el comal, las pasan al plato y las abren por la mitad para agregar el toque fresco, nopalitos con cebolla y cilantro. ¿Queso rallado?, siempre. Y por último, llega la sorpresa que mejora la experiencia, un trozo de chicharrón crujiente que hacen pedacitos para que te toque en cada mordida.
Tienen varias salsas pero si te gusta comer picante, al final de la mesa tienen un gran molcajete con salsa verde con habanero tatemado. No te preocupes, no solo pica, está llena de sabor.
Foto: @dadthegriller
Prueba los guisados y los tacos de longaniza, o échate una segunda gordita con doble chicharró n.
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