La industria vitivinícola mexicana
vive diferentes retos ante la pandemia y es inminente la llegada de nuevos modelos de comunicación y comercialización del vino, así como la incursión más dinámica en el mundo digital. Sí, han habido afectaciones económicas, pero también se han encontrado alternativas para sobrellevar la crisis, además de que tanto el enoturismo como la práctica del oficio de los sommeliers en sala requieren adecuaciones que van más allá de los protocolos sanitarios.
Hans Backhoff
, presidente del Consejo Mexicano Vitivinícola , y CEO Monte Xanic, explica que hay que considerar que esta actividad es una agroindustria y como parte de ella existen diferentes ciclos del año en los cuales se llevan a cabo diferentes partes del negocio. “Las compañías que no se encuentran capitalizadas no tienen ingresos para invertir en el campo y se ven obligados a sacrificar parte de su materia prima”, agrega.
Es agosto y ya empiezan las vendimias pero al no tener ventas, hay un déficit en producción y un sobre inventario conforme a lo que se venía acostumbrando en años anteriores, dice este especialista. Él opina que aún hay muchas preguntas que no pueden ser contestadas pues el panorama es incierto y depende de factores ajenos a esta actividad, pero que lo que es un hecho es que la comercialización no espera y dependen de la activación de la economía y de un buen desempeño de los diferentes canales de ventas.
“Existen unos muy afectados, otros no tanto y algunos más que se han desarrollado bien como los autoservicios, las ventas en línea y las que son directas al consumidor”, añade. Además, explica que el mayoreo también está siendo dañado, pero que sin duda los más perjudicados son los distribuidores que dependen de lleno de los centros de consumo como restaurantes y hoteles.
Las pérdidas en esta industria son de alrededor de un 60% con respecto al año anterior, informa Paz Austin, directora general de este consejo. Sin embargo, las estrategias digitales se han convertido en una oportunidad para los involucrados en estos negocios. Este contexto aceleró la necesidad de mejorar plataformas de comercio electrónico, de educación a distancia, de campañas de redes sociales y de alianzas con aplicaciones, sitios de internet y líderes de opinión en sinergia.
La digitalización ya estaba en la agenda del consejo antes de la llegada del coronavirus a México, pero esto solo aceleró a que hubiera implementación, gestión y mejoras de páginas de internet e e-commerce: quienes ya las tenían estaban un paso adelante y quienes no, necesitan actualizarse. Paz comparte que el vino mexicano es la categoría número uno de ventas en Amazon y eso es algo positivo y sirve como ejemplo de adaptación. “Lo interesante es que este canal terminará por desarrollarse y será uno de los más atractivos para las ventas en el futuro”, apunta Hans.
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Noah Tovares, cofundador de la tienda en línea Vinos Chidos , es una muestra. Él narra que esta empresa de vinos a domicilio era una idea que se materializó durante la contingencia y que nació por la necesidad de tener una página accesible en usabilidad, con precios pagables y una imagen atractiva. Ellos llevan tu pedido una hora antes de tu comida y su oferta incluye vinos naturales y biodinámicos, tanto mexicanos como de otras partes del mundo, además de una selección con una curaduría previa. Él y su socio, el chef Marco Carboni, tienen muy claro el perfil de sus consumidores meta: un mercado emergente de jóvenes, de 25 a 40 años, que desean tomar y descubrir vinos. Incluso, integran en su filosofía la búsqueda de un discurso ecológico en proyectos incluidos en su catálogo, como en sus empaques, ya que envían una sola caja de cartón para no generar desperdicio excesivo.
La sommelier Laura Santander considera que ante esta realidad se requieren nuevas habilidades. Ella asegura que quienes se dedican a esta labor son aún más esenciales que antes, ya sea estando en el centro de consumo o en otros aspectos como la difusión o la asesoría. “Ante esta circunstancia, te tienes que volver el mejor vendedor del mundo y ser el mejor contador de historias, darle la vuelta a lo que siempre hiciste, ya sea dando clases, en lives, en redes...”, afirma.
Laura sugiere que hay que reinventarse y hasta democratizar el discurso. Ella cambió sus propios esquemas y prejuicios: da clases a precios más bajos, toma cursos y talleres y hasta abrió sus horizontes al recomendar vinos de súper que tienen buena calidad. Considera que el panorama para el consumidor —y para las bodegas de vino mexicano— es muy prometedor. “A nadie le interesa escuchar si el vino huele a fresas, frambuesas y zarzamoras, nos interesa saber porqué ese proyecto es único y especial. Estas son las oportunidades que todo el mundo quería sin saber que las quería”, declara.
Para quienes dependen del enoturismo en México , el impacto es mayor pues ante el confinamiento y la falta de flujo de viajeros sus ingresos se detuvieron, dice Paz. Ella agrega que se necesitan dos herramientas claves para apoyar a ese sector: la paciencia y la capacitación, además de la unión en pro de un bien común. Piensa que habrá un turismo más ordenado que necesita del compromiso de todos los involucrados, además del seguimiento puntual de las reglas de salud pública.
Respecto a este tema, Hans se mantiene positivo ya que menciona que existen zonas con reconocimiento internacional como Valle de Guadalupe , así como rutas de viaje ya establecidas como las de Coahuila, Querétaro y Guanajuato, que llevan años trabajando. Confía en que los visitantes nacionales ayudará a que este rubro se reactive y comparte que las vendimias de este año tendrán actividades en línea para celebrar virtualmente con el mismo ánimo y orgullo. Laura, por su parte, está segura de que las experiencias serán más especializadas, menos masivas y con costos más conscientes.
“Esta pandemia deja varias lecciones. La más importante es que hay que diversificar los riesgos y entender la dinámica del mercado […] Hay cosas que llegaron para quedarse y otras que no van a cambiar: la tendencia de cómo se venía consumiendo vino mexicano se va acentuar, se va a reforzar su posicionamiento”, enfatiza Backhoff.
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