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Después de cocinar viene una de las tareas más complicadas (y menos preferidas) por todos: lavar los trastes. Los productos que utilizamos para cocinar los alimentos pueden impregnar las ollas, sartenes y cazuelas con grasa.
No hay nada más incómodo que lidiar con la grasa en los utensilios de la cocina, pues nos da la sensación de que no han quedado limpios. Pero no te preocupes porque en Menú te compartimos un truco infalible para arrancarla por completo.
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¿Cómo quitar la grasa pegada de los trastes?
La grasa en los trastes no sólo los hace sentir oleosos al tacto, sino que puede atrapar olores desagradables y residuos de los alimentos. Puedes detectarla fácil: al mojar las ollas, sartenes y cazuelas adquieren una especie de "capa impermeable" que impide que el jabón haga su trabajo y por más que los talles no lograrás eliminarla.
Lo anterior implica dañar tus utensilios. Con la fricción durante el lavado es posible que se terminen despostillando, que el teflón se despegue o termines rayándolos. Para ahorrarte todos estos inconvenientes, te sugerimos aplicar el truco del bicarbonato de sodio que consiste en hacer una pasta para "arrancar" la grasa.
¿Cómo se realiza? Espolvorea un poco de bicarbonato de sodio sobre tu olla, sartén o cazuela. Agrega un chorro de agua para que se forme una pasta espesa. Deja que repose por 30 minutos y limpia con un trapo húmedo el exceso.
Es posible que, además de la grasa, aparezca otro enemigo: la choquía. De acuerdo con la Academia Mexicana de la Lengua, se trata del aroma que aparece en los trastes y que se describe como "a grasa" o "podrido".
Para muchas personas, el olor a choquía es intolerante y se origina por embutidos, carnes grasosas, el uso de aceites para la cocina, quesos curados, etcétera. Por suerte, también una manera de eliminarlo.
¿Cómo quitar el olor a choquía de los trastes?
El olor a choquía en los trastes puede ser desagradable y persistente, aún después de lavarlos. Aplica cualquiera de los siguientes consejos para despedirte de él:
- Lava tus trastes con blanqueador: Mezcla 1 cucharada de blanqueador con 10 de agua y rocía la mezcla en tus utensilios. Espera 30 minutos y luego enjuaga con agua caliente. Vuelve a lavar tus ollas, sartenes y cazuelas como de costumbre para que queden relucientes.
- Utiliza rodajas de limón. Corta un limón en rodajas y colócalas dentro de tus trastes. Permite que reposen de 3 a 4 horas y lava los utensilios con normalidad. Este cítrico tiene la capacidad de neutralizar los malos olores.
- Lava los trastes de inmediato: Después de utilizar tus trastes, elimina los restos de comida y lávalos con agua caliente, lo que evitará que el olor a choquía se acumule.
- Seca tus trastes: Luego de lavar tus ollas, sartenes y cazuelas, sécalos con un trapo limpio o con una toalla de papel para impedir que se forme condensación y aparezca el olor a choquía.
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