Los cocteles tienen un toque de magia, nos hacen descubrir sabores nuevos mientras que la precisión del bartender y la manera en la que se sirven en vasos, copas y contenedores de todo tipo, nos hacen sentir elegantes y sofisticados en cada sorbo.
El Manhattan es un trago de ese estilo, su color rojizo y la robustez de su sabor, te hacen imaginarte que lo bebes en uno de los mejores bares de la ciudad de los rascacielos.
En la mayoría de los casos, cuando una receta se convierte en un elemento famosos de la cultura, es difícil rastrear con certeza su origen.
Foto: Freepik
Como sucede con muchos otros cocteles , se hacen suposiciones basadas en historias y leyendas que pasan de boca en boca, que aunque pueden no ser muy precisas, sin duda le otorgan ese toque misterioso a un trago.
Cuando se trata del popular Manhattan , su suerte no es muy diferente, por ello te contamos dos de las historias más conocidas acerca de su nacimiento, que a pesar de tener distintos autores, podemos estar seguros de que su lugar de origen fue en este distrito del mismo nombre, en la ciudad de Nueva York .
La primera versión sobre el origen del coctel Manhattan lo ubica entre la clase política de los Estados Unidos de América.
Se dice que, en el año de 1870, el concurrido Club Manhattan fue el lugar elegido por Winston Churchill como sede para llevar a cabo una fiesta durante la candidatura de Samuel J. Tilden.
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Como parte de la organización, la madre de Churchill, Lady Randolph Churchill, solicitó al encargado del bar que inventara una nueva bebida para conmemorar la ocasión. Dicho trago fue del gusto de los asistentes, por lo que continuó haciéndose en el club y fue así como la mezcla de whiskey, vermut y amargo de angostura dio origen al Manhattan .
El “Valentine's Manual of New York” es un libro del año 1923, en el que se encuentra escrito el testimonio de Wlliam F. Mulhall, quien trabajó durante muchos años como cantinero en Nueva York .
Este personaje, aseguró que él conoció al verdadero autor del coctel Manhattan , y que se trataba de un hombre que se hacía llamar Black y que atendía un pequeño bar en Broadway.
Cualquiera que sea la verdadera historia de este trago, sin duda fue una gran aportación al mundo de la coctelería y siempre estaremos agradecidos de esta gran idea. Te dejamos la sencilla receta para que lo disfrutes en casa.
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c/n de hielo
3 gotas de Amargo de Angostura o bitter
3 oz de whiskey de centeno o bourbon
1 oz de vermut rojo dulce
1 twist de cáscara de naranja
Enfriar una copa martinera.
En un shaker o coctelera, añadir todos los ingredientes y suficiente hielo. Cerrar y agitar vigorosamente hasta enfriar.
Colar y servir en la copa, decorar con un twist de cáscara de naranja.
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