El queso amarillo es de los favoritos para comer diario porque no puede faltar en los sándwiches pero, ¿te has preguntado de qué está hecho este tipo de queso?
Paul Kindstedt realizó una investigación para la Universidad Vermont sobre el origen del queso en la que menciona que el queso tipo americano o amarillo proviene de Inglaterra del siglo XIX y se llama cheddar, era el favorito de esta población.
Al ver esto, los exportadores de Estados Unidos se pusieron las pilas en cuanto a la demanda y tiñeron su queso blanco con achiote y polvo naranja, hecho a base de semillas. "Los ingleses compraron 2.6 millones de kilogramos del cheddar coloreada en 1963, llamándolo queso americano", comenta el investigador Paul Kindstedt.
Y así fue como Estados Unidos comenzó a hacer famoso su queso amarillo y a comercializarlo internacionalmente. En la investigación de la Universidad de Vermont se cuenta que incluso durante la Pimera Guerra Mundial hicieron quesos más anaranjados y se incluían en las raciones de los soldados.
Como toda evolución, con el paso del tiempo pasó de queso naranja a amarillo. Según una radiografía que realizó elpoderdelconsumidor.org el 8 de marzo del 2016 sobre la marca de queso tipo americano Singles, esto es lo que los constituye:
- Sólo 22% es queso y el resto son sólidos.
- Contiene 238 miligramos de sodio por cada rebanada, lo que corresponde al 11.9% del sodio total recomendado al día para un adulto y el 15.8% para un niño.
- Fosfato de calcio.
- Natamicina.
- Almidón.
- Leche.
Parece un proceso químico muy arduo, sobre todo combinar los ingedientes para que el queso no quede amargo, pero ¡oh sorpresa¡ Este tipo de productos son considerados con queso y no quesos. Aunque las diversas marcas en el mercado varían en sus componentes, muchas de ellas hacen sus quesos amarillos de estas bases. Así que antes de tu próxima compra revisa la etiqueta para que sepas cuánto queso real contiene. Y como todo alimento, no es recomendable consumirlo en exceso.