El chile chipotle es uno de los recursos más usados en la comida tradicional mexicana, pues desde la época de nuestros ancestros se tienen registros de su consumo y cuidado en la elaboración. Fray Bernardino de Sahagún anotó en sus crónicas la presencia de este chile, cuya venta se situaba en el mercado de Tlatelolco.
"A escala internacional, México es el segundo productor de chiles, dedicándole más de 140 mil hectáreas al cultivo de este fruto, las principales variedades que se cultivan son: el jalapeño, serrano, poblano, morrón y habanero", de acuerdo con el sitio de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación.
El chile chipotle viene del chile jalapeño , pero también puede ahumarse a partir del chile morita . Sus beneficios nutricionales son varios: el más importante es que eleva los niveles de dopamina , neurotransmisor que nos pone felices; capsaisina , que acelera el metabolismo; vitaminas A, B y C y minerales como el hiero y el magnesio.
A continuación les dejamos dos recetas fáciles, nutritivas y sencillas para disfrutar de este rico fruto de la tierra.
Chuletas enchipotladas
Un kilo de chuletas de cerdo
Un kilo de jitomate
Una lata chica de chipotle
Una pizca de cominos
Tres papas cocidas y cortadas en cuadritos.
Sal al gusto
En un comal caliente se ponen los jitomates limpios y se asan hasta que la piel se comience a despegar. Cuidado de no quemarlos. Una vez listos, se pelan y se ponen en la licuadora con los cominos y la lata de chile chipotle. Agregar un poco de agua limpia. Si se come poco picante, poner sólo tres chiles enteros o menos. Reservar esta salsa.
En una cacerola agregar un poco de aceite, las chuletas de cerdo, sal al gusto y freír. Un vez que la carne esté bien cocida, se baja el fuego y se les vacía la salsa de chipotle recién molida. La cacerola se tapa para que lo sabores se integren y termine de cocinarse.
Cuando el guiso ha tomado el sabor perfecto, se le ponen papas cortadas en cuadritos, ya cocidas. Un par de minutos de hervor y listo.
Chipotles con piloncillo
Un cuarto de chipotles secos
Un cilindro y medio de piloncillo
Vinagre de manzana o piña
Una cabeza de ajos pelada
Una cebolla mediana
8 pimientas gordas
10 clavos de olor
Una pizca de sal
Hierbas de olor
Procedimiento:
En una cacerola profunda se ponen los chiles a hervir ligeramente para que se suavicen y se limpien de impurezas. El agua se tira y se apaga la estufa.
En el mismo recipiente se dejan los chipotles y se les pone la mitad de agua limpia y la mitad del vinagre de manzana o piña hasta que el líquido los cubra.
Se vuelve a encender el fuego a baja intensidad y se les agregan los dientes de ajo, la cebolla mediana cortada en rebanadas, 8 pimientas gordas, 10 clavos, el piloncillo y la pizca de sal.
Esta mezcla de chiles, olores y sabores deberá hervir a fuego bajo hasta que el líquido quede espeso, a manera de miel. Una vez que tengamos casi listos nuestros chiles dulces, se agregan las hierbas de olor.
Cinco minutos para que todo se integre y listo, ya tenemos nuestros chiles chipotles caseros y endulzados con piloncillo.
Provecho.