Las bacterias benéficas o probióticos son microorganismos que si se consumen en las cantidades adecuadas pueden aportar importantes beneficios para la salud intestinal . Gracias a bacterias como Lactobacillus, Streptococcus o Leuconostoc es posible elaborar algunos alimentos fermentados como vinos, o productos derivados de la leche.
Estos organismos se encuentran en algunos productos derivados de la leche como el yogur , la mantequilla, algunos quesos, o alimentos y bebidas como la Kombucha, el miso, el tempeh y algunas cervezas. Conoce más sobre estos alimentos con bacterias beneficias o probióticos.
Este alimento rico en probióticos es uno de los más conocidos e importantes, pues ayuda a regular la flora intestinal que ayuda a digerir mejor los alimentos. Además, ayuda a evitar la formación de bacterias que afectan al intestino y que causan enfermedades como diarrea y estreñimiento. Por si fuera poco, de acuerdo con algunos estudios disminuye la incidencia de infecciones vaginales provocadas por hongos como la Candidiasis.
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Esta bebida se elabora con la mezcla de un té (té verde o negro, de preferencia), y un cultivo de levaduras y bacterias benéficas conocidas como SCOBY, de consistencia gelatinosa capaz de transformar los polifenoles del té en compuestos orgánicos que evitan que se desarrollen otros microorganismos.
La kombucha ayuda a desintoxicar el organismo, reduce la presión arterial y el nivel de colesterol. También alivia los síntomas de artritis y es una buena aliada contra las hemorroides.
Es una pasta con origen japonés que es fermentada de manera natural con semillas de soya, habas o en ocasiones cereales como el arroz, cebada o trigo. El miso sin pasteurizar aporta grandes concentraciones de enzimas digestivas que favorecen el equilibrio de la flora intestinal.
Además tienen poder antioxidante que ayuda a depurar sustancias tóxicas del organismo eliminando los radicales libres.
El tempeh es un ingrediente fermentado a partir de la soya y de un hongo llamado Rhizopus, su presentación normalmente es en forma de bloque o de pastel comprimido.
Además, regula los niveles de azúcar en la sangre, funciona como antioxidante gracias a su alto contenido en manganeso y cobre, reduce el riesgo de padecer enfermedades cardíacas y ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer, en especial los relacionados al tracto digestivo.
Aunque no lo creas la cerveza se elabora con bacterias benéficas tales como la Saccharomyces cerevisiae que contribuye a su fermentación. Contiene polifenoles que podrían modificar la composición de la flora microbiota favoreciendo el crecimiento de algunas bacterias beneficiosas e impidiendo la proliferación de otras perjudiciales.
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