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El té verde es una de las bebidas más populares en el mundo, tan solo por detrás del café. Se elabora a base de las hojas secas de la planta camellia sinensis y es originaria del continente asiático.
Diversos estudios han encontrado que dicha infusión tiene muchas propiedades medicinales, lo que ayuda a la prevención de ciertas enfermedades. Pero consumirla en exceso podría ser contraproducente para tu salud.
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¿Qué efectos secundarios puede tener el té verde?
De acuerdo con Healthline, el té verde ayuda a regular el colesterol, favorece la pérdida de peso, mejora la función cognitiva y fortalece la memoria. Además, es rico en vitamina E, azufre, calcio, cafeína cobre, hierro, magnesio, fósforo, potasio y flúor.
¡Aguas con la ingesta! La revista Tua Saúde señala como consumo seguro de 2 a 3 tazas por día. En cambio, rebasar esta dosis podría traernos efectos secundarios como:
Afectaciones al sistema nervioso
La cafeína es uno los principales activos del té verde y, en grandes cantidades, puede afectar al sistema nervioso y cardiovascular. Según la Asociación Americana de Psiquiatría, este compuesto se asocia a trastornos del sueño, aumento en la presión arterial y síntomas como la taquicardia.
Riesgo de padecer anemia
La anemia se produce por el déficit de hierro y tanto el té verde como el café afectan el proceso de absorción de dicho mineral.
Por eso, el consumo excesivo de ambas bebidas representa un factor de riesgo, así que tampoco se recomienda para las personas que tienen déficit de hierro o antecedentes de anemia.
Daños en el hígado
Un estudio reciente de la Universidad de Michigan advierte los riesgos que tiene el té verde sobre la salud renal, pues la ingesta excesiva de productos elaborados a base de plantas podría ocasionar toxicidad hepática.
Recordemos que la camellia sinensis contiene catequinas y, cuando se bebe en grandes dosis, afecta las reacciones metabólicas e inhibe la actividad de los hepatocitos (células del hígado), lo cual desencadena esos efectos tóxicos.
¿Quién no puede tomar té verde?
Por otra parte, las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben cuidar el consumo del té verde, ya que puede traer complicaciones derivadas del consumo de altas cantidades de cafeína.
Además, igual que con el hierro, se puede ver afectada la absorción del ácido fólico, que es un nutriente esencial durante el embarazo.
Con moderación y en cantidades adecuadas, el té verde no es peligroso. Sin embargo es importante que tengas en cuenta estas consideraciones para evitar problemas de salud.
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