Es probable que hayas escuchado sobre el árbol de parota debido a su popularidad como material para la elaboración de muebles de alta calidad, sin embargo, este árbol tiene otros usos que pueden ser de tu interés. Por ello, en Menú te contamos sobre los beneficios que puedes obtener de él.
El árbol de parota, cuyo nombre científico es Enterolobium cyclocarpum, es un árbol caducifolio que suele alcanzar entre 20 y 30 metros de altura, aunque en las mejores condiciones hay ejemplares que llegan a medir hasta 45 metros. Su tronco puede medir hasta 3 metros de ancho y su copa suele ser amplia con hojas de color verde intenso.
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Esta especie es originaria de las regiones tropicales de América, puede encontrarse en México, Venezuela, Brasil, Jamaica, Cuba, Trinidad y Guyana, tanto de forma silvestre como en cultivos.
El árbol de parota, también conocido como agucastle o nacaxtle, en México está presente en estados como Chiapas, Colima, Guerrero, Jalisco, Oaxaca, Yucatán, Quintana Roo, por mencionar algunos.
El fruto que produce el árbol de parota es una peculiar vaina aplanada de forma circular y enroscada a la que también se le llama parota. Suele medir entre 7 y 15 centímetros de diámetro, su exterior es color verde y conforme se seca con el tiempo se torna de un color café oscuro.
En su interior, la vaina de parota alberga entre 5 y 15 semillas grandes de entre 2 y 3 centímetros de largo, de forma ovalada y un tanto aplanada. Están rodeadas por una pulpa fibrosa de sabor y aroma dulce.
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Las semillas de parota tienen un gran uso dentro de la gastronomía. Son totalmente comestibles y cada vez es más común encontrarlas como recurso alimenticio debido a su potencial nutritivo.
De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) las semillas de parota contienen 17 aminoácidos. Por ello, la composición de aminoácidos de la semilla se ha comparado nutricionalmente con la harina de trigo y pescado.
Entre los nutrientes disponibles en las semillas de parota se encuentra su alto contenido en proteínas, pues corresponde aproximadamente entre el 32 y 41% de su peso. Aportan también minerales como el hierro, calcio y fósforo, indispensables para el correcto funcionamiento del organismo .
Aporta alrededor de 234 mg vitamina C por porción, por lo que es una fuente importante de esta vitamina, que se encarga de fortalecer el sistema inmune, de prevenir infecciones y de retrasar el envejecimiento celular. El fruto en su etapa verde se utiliza también para tratar casos de diarrea.
Las semillas de partoa se comen principalmente tostadas, como base para salsas, dentro de sopas y ensaladas e incluso hay quienes las tuestan y muelen para usar como un sustituto similar al café.
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