Ah, el azúcar, ese caleidoscopio de minúsculos cristales níveos que endulzan nuestras comidas y momentos, es una fuente de energía de rápida asimilación, vital para el funcionamiento de nuestro organismo.
Es el combustible que nutre al cerebro, al sistema nervioso y a los músculos, permitiendo que nuestras ideas fluyan y nuestros cuerpos se muevan con agilidad. Sin embargo, disfrutar de su dulzura conlleva un riesgo considerable: el consumo excesivo de azúcar puede tener consecuencias devastadoras para nuestra salud.
Si buscas una opción más saludable para reducir tu consumo de azúcar o eliminarlo de tu dieta definitivamente, en Menú te decimos todo lo que necesitas saber sobre el xilitol, la mejor alternativa para reemplazar el azúcar blanca o refinada.
El xilitol es un alcohol de azúcar que se encuentra de forma natural en frutas y verduras como fresas, frambuesas, arándanos y coliflor en pequeñas cantidades. Sin embargo, se obtiene industrialmente por hidrogenación de la D-xilosa, obtenida por hidrólisis del xilano, un polisacárido abundante en las virutas de madera duras como el abedul y las mazorcas de maíz.
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De acuerdo con un artículo publicado en Harvard Health Publishing, el xilitol se destaca como la mejor alternativa para reemplazar el azúcar debido a sus numerosos y sorprendentes beneficios.
El xilitol contiene aproximadamente 2.4 calorías por gramo, en comparación con las 4 calorías por gramo del azúcar, por lo que este edulcorante natural es una gran alternativa para personas con diabetes o con síndromes metabólicos relacionados.
El xilitol tiene un índice glucémico de tan solo 7, en contraste con el del azúcar que ronda 60, por lo que no eleva los niveles de glucosa e insulina en sangre.
Consumir entre 5 y 10 gramos diarios de productos con xilitol (caramelos, chicles, pasta dental o enjuague bucal) reduce los niveles de bacterias dañinas en la boca y previene significativamente la caries según un estudio publicado en Journal of International Society of Preventive & Community Dentistry.
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"El xilitol es un ingrediente que aporta calidad de vida", asegura Javier Larragoiti, Ingeniero Químico con Maestría en Biotecnología por la University College London, ex investigador de la universidad de Harvard y fundador de Xilinat, empresa orgullosamente mexicana que, además de comercializar xilitol en el país, está liderando la obtención natural a gran escala de este benéfico edulcorante.
"El problema con las hidrogenaciones químicas es que son sumamente perjudiciales para el cuerpo humano. El xilitol, al final de cuentas es un alcohol que se obtiene a partir de la xilosa presente en el olote del maíz. Al obtenerlo mediante un proceso de fermentación, similar al de la cerveza o el vino, evitamos la hidrogenación química y, además, el proceso termina siendo mucho más económico, ya que no requiere de altas presiones ni de altas temperaturas", explica Javier Larragoiti.