Existen bebidas que a todos nos encantan y nos deleitan con su exquisito sabor y frescura. Pero consumir algunas de estas no siempre resulta algo bueno, especialmente si lo hacemos de manera excesiva e ignorando sus etiquetas e índices nutrimentales, lo que, a la larga podría estar poniendo en peligro la salud de nuestros riñones.
Si estás buscando cuidar tus riñones debes saber que empezar por la alimentación es algo crucial para conseguirlo y que en ese sentido las bebidas también pueden determinar su estado. Por ello aquí te decimos cuáles debes evitar.
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Nadie puede negar que los refrescos tienen un sabor delicioso y son muy apetecibles, sobre todo en épocas calurosas pues nos ayudan a refrescarnos para continuar con nuestro día.
Pero estas bebidas son de los principales enemigos de tus riñones, pues su buen sabor se debe a la gran cantidad de azúcar y al gas que contienen, además de colorantes y otros elementos que pueden empeorar la situación.
Tomarlos con regularidad no es bueno, pues según la Asociación Catalana de Pacientes Hepáticos, su consumo elevado se relaciona con mayores posibilidades de padecer una enfermedad renal. A su vez, Web MD expone que un estudio arrojó que las mujeres que bebían refrescos con regularidad tenían una reducción de 30% en el funcionamiento de sus riñones.
No cabe duda que a todos nos gustan este tipo de bebidas, pero lo mejor es evitarlas o consumirlas de manera moderada.
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A todos nos encantan las malteadas, frappés, licuados, el yogurt bebible o un buen vaso de leche. Y aunque las bebidas lácteas no son del todo malas, su consumo en exceso sí puede traer problemas a tus riñones debido a la gran cantidad de proteína que contienen.
Según Piedmont Healthcare, en el caso particular de los riñones, demasiada proteína puede ser difícil de metabolizar, por lo que es importante no excederse al tomar bebidas con lácteos.
Una opción mejor es consumir bebidas con proteína vegetal, como la leche de almendras, la leche de coco o la de soya.
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Cerveza, tequila, whisky, vino, micheladas y hasta azulitos, es difícil que alguien se niegue a una copa de alcohol bien fría, sobre todo en la fiesta, pero seguro has notado que después vienen las constantes ganas de ir al baño, ¿los culpables?, tus riñones.
Y es que consumir alcohol hace que los riñones comiencen a procesar de manera diferente los líquidos necesarios para la hidratación del cuerpo, filtrando la mayoría de ellos a la vejiga. La labor que tus riñones hacen cuando consumes alcohol es titánica, pues además toman líquidos de otros lugares como las capas protectoras del cerebro (de ahí que te duela la cabeza y te dé resaca).
Ya lo sabes, consumir unas cuantas copas no es malo pero excederse sí. Cuida tus riñones y no los expongas a tanto trabajo que después impacte en tu salud.
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¡Así es! La cafeína también puede dañar tus riñones, y está presente en bebidas como el café, té, algunos refrescos y bebidas energéticas.
Lo mejor es evitar este tipo de bebidas ya que también se relacionan con los cálculos renales y pueden ejercer presión en los riñones, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales.
Si quieres consumirlas, consulta a tu médico para saber en qué cantidad puedes beberlas.
Ahora que ya lo sabes es importante que moderes el consumo de estas bebidas, pues aunque sean deliciosas caer en un exceso podría dañar tus riñones. La salud es primero, recuérdalo.
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