No cabe duda que la carne roja y los derivados de origen animal forman parte de los alimentos favoritos en la cocina mexicana, sin embargo, estudios recientes señalan que conviene moderar su consumo.
, profesor de la Universidad de Aberdeen y miembro Comité Científico Asesor Británico, recomendó a la comunidad mundial reducir a al menos 10% el consumo diario de calorías que se ingieren a través de quesos, mantecas y carnes rojas, ya que la cantidad de grasas saturadas que aporta puede afectar de manera profunda al corazón.
El exceso de estas en el torrente sanguíneo causa una sobre existencia de colesterol en las venas, lo que genera obstrucciones y por ende la reducción del bombeo de sangre a lo largo del sistema circulatorio, teniendo como desenlace un infarto u otro tipo de afecciones cardíacas.
del gobierno de Estados Unidos, recomienda que las personas menores a los 19 años tengan un nivel de colesterol menor a los 170 mg/dL (miligramos por decilitro), y de 125 a 200 mg/dl en adultos mayores de 20, tanto hombres como mujeres.
La Organización Mundial de la Salud, respaldada por investigaciones como la que realizó el doctor Martin Grootver de la Montford University de Leicester en 2015, recomendaron sustituir el uso de la manteca y mantequilla por aceites vegetales como el de canola, soya, girasol u oliva, siendo el último de estos el más benéfico.
El doctor Grootver demostró que, cuando se calientan las grasas de origen animal, su estructura química se modifica, generando en estos un compuesto orgánico conocido como aldehídos , los cuales, en exceso, generan una mayor acumulación de colesterol , lo que no sucede en el caso de los aceites vegetales.
Para evitar los estragos de las grasas saturadas de estos alimentos generan en nuestra vida, el doctor Haggarty sugirió reemplazarlas por nueces, semillas, aceitunas, y aguacate, alimentos repletos de aceites ligeros y benéficos para el cuerpo, incluso para mejorar la salud de la piel.