Se dice que, en el año 1191, el monje Eisai llevó el té verde a Japón. Con el tiempo, su consumo salió de los templos y se empezó a tomar entre la población, arraigándose en su cultura. Actualmente, la variedad más pura y concentrada de esta bebida es el matcha , que ha demostrado ser una poderosa fuente de antioxidantes. Liliana Díaz, directora comercial de Matcha Kaori , explica que este concentrado de color intenso y de textura suave “es la forma más pura y concentrada de las hojas más finas y tiernas de la cosecha japonesa de té verde, sin tallo ni nervadura, lo que potencializa sus beneficios.
“Es un té producido artesanalmente, protagonista de la tradicional ceremonia del té en Japón”. A diferencia del té verde que conocemos, el matcha se presenta en polvo, no es fermentado ni seco y es considerado superfood por su alta concentración de antioxidantes. “Es una selección de las mejores hojas, las cuales, después de un cuidadoso proceso para mantener sus propiedades, son molidas hasta lograr un polvo ultrafino, con múltiples beneficios para la salud . Entre ellos: favorece a la buena circulación, digestión y mantiene regulados los niveles de glucosa y colesterol en la sangre”, detalla Liliana.
Los beneficios solo se pueden encontrar en un auténtico té matcha japonés. En el mercado existen versiones inferiores etiquetadas como matcha, pero que en realidad no cumplen con los estándares que se requieren. Por ello, es importante conocer el origen del té que se consume. Los campos donde se cultiva Matcha Kaori se encuentran en zonas de Uji, Kioto, Shizuoka y Kagoshima, donde la tierra y el clima hacen que se desarrolle mucho mejor. Además, existe una niebla muy densa que protege a las hojas del sol, aumentando así la concentración de los nutrientes .
Más beneficios
De acuerdo a sus promotores, es un estimulante que proporciona energía gracias a su alta concentración de vitaminas, minerales y aminoácidos fundamenales para el buen funcionamiento del cuerpo. Ayuda a bajar de peso porque acelera el metabolismo, logrando que se quemen más calorías. Evita también la retención de líquidos gracias a la fibra que contiene. Finalmente, favorece la circulación, digestión y concentración.
Además del té, que se puede tomar frío o caliente, solo o con leche, existe una gran variedad de productos, como frappés, repostería, aderezos y dulces, entre otros.