La comida en las calles de la zona urbana de Japón es parte de la cultura alimenticia nipona. En las ciudades se caracteriza por ser fácil de transportar, sencilla de comer y, sobre todo, tener mucho sabor. En México, se busca constantemente reproducir los sabores de la comida japonesa en múltiples lugares, restaurantes y locales. Algunos con éxito, otros creando combinaciones poco comunes.
Cerca de Paseo de la Reforma, el chef Edo Kobayashi tiene una oferta gastronómica japonesa bastante amplia. Desde bares y cocteles, hasta ramen y sushi, el chef originario de Tijuana, Baja California, abrió el primer restaurante mexicano especializado en yakitori, un platillo japonés que seguro has visto, pero quizá poco sabes de él, debido a sus variaciones culturales, de ingredientes y presentaciones.
Si algo tiene en común es que la parrilla es el sello de estas "brochetas". En Menú te contamos de qué se trata, qué puedes pedir y en dónde se ubica este restaurante.
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El primer restaurante de yakitori en México
Yakitori es una de las comidas más populares en Japón. Se trata de una brocheta hecha tradicionalmente de pollo, pero que también se puede elaborar con carne de puerco, mariscos u otros ingredientes. Se asa con binchotan, un carbón que no produce humo y que no modifica el sabor de la carne.
El chef Kobayashi es conocido por intentar reproducir la gastronomía japonesa en México de la manera más informada posible y culturalmente apegada a las tradiciones niponas. Hiyoko no es la excepción. Si bien no es una parrilla urbana, sí se centra en la experiencia donde el comensal ve cómo se preparan sus alimentos, pues el estilo del restaurante es un omakase, en donde el chef a cargo puede sugerir platillos frente a la barra, donde también está la cocina y la mesa.
Aunque hay una variedad de ingredientes, si algo destaca es el pollo, lo que tiene sentido porque el yakitori original se compone de esta proteína. Este pollo proviene de Kobayashi Farm, una granja y criadero de la familia del chef Edo, donde se cuida meticulosamente la crianza, alimentación y bienestar de los animales para garantizar la mejor calidad posible.
Este respeto por el ingrediente se traduce en el sabor de las "brochetas", las cuales se preparan al momento frente a los 15 asientos de la barra. El omakase presenta una selección curada de yakitori y otros platillos, acompañados de una oferta de cerveza, whisky, sake y vino.
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El menú de Hiyoko
Para disfrutar de Hiyoko tienes dos opciones: primero, el menú omakase de yakitori, que como en toda cocina de este estilo, se toman en cuenta los gustos y preferencias de cada comensal, que el chef pregunta. Es aquí donde la confianza entre ambos se da, pues se convierte en una experiencia pensada para disfrutar de una selección de "brochetas" personalizada.
La otra manera es más sencilla, y es pidiendo a la carta. Esta opción, si bien carece de sorpresas, puede ser una buena forma de conocer la oferta, probar el restaurante y degustar lo que te gusta sin más preámbulos. Entre las opciones disponibles se incluyen platos tradicionales como arroz gohan, ensalada de cilantro, edamames y onigiris.
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Durante el día, además de los tradicionales yakitori, se ofrecen charolas de teishoku, una interpretación japonesa de la comida corrida mexicana, que incluye un plato fuerte, guarniciones, sopa y arroz gohan. Por la noche, Hiyoko transforma su espacio para ofrecer una experiencia más íntima y sofisticada. La música cambia, la iluminación se oscurece y se acentúa el carácter exclusivo y reservado del restaurante.
¿Qué comer en Hiyoko? Menú recomienda:
Si vas a Hiyoko te contamos de algunos platillos que vale la pena pedir. Si te interesan los vegetales, puedes empezar con la "brocheta" de espárrago, que va asada y con un toque de sal. No te pierdas el elote baby, de textura suave y servido en plato; es decir, el único que no va en brocheta. La estrella de las opciones vegetales del restaurante son los enoki, una especie de hongo japonés bastante nutritivo que se caracteriza por venir en conjunto y tener un sabor umami, suave y ligeramente dulce. Tampoco viene en brocheta, pero puedes usar un palillo para tomarlos.
Si prefieres conocer el sabor del pollo y el cerdo, te recomendamos pedir el negima, un yakitori de muslo de pollo, acompañado de cebollita cambray, que se caracteriza por la firmeza y buena suavidad de la proteína. Otra opción es el bonjiri, una "brocheta" de rabito de pollo, de sabor dulce y ahumado. Si buscas consumir cerdo, puedes empezar con la butabara, que lleva pancetta de cerdo con umeshiso (combinación del fruto japonés umeboshi, similar al albaricoque y hoja shiso, una planta japonesa de la familia de la menta).
También puedes pedir el yakitori de jalapeño relleno con tocino, pero cuidado, porque puede picar. Para el postre, una gran opción es el pudín de vainilla con caramelo al fondo y un toque de sal de mar. Incluso te puedes quedar con la estampita de gatito con la que se sirve el dulce.
Una opción para acompañar tu cena es el clásico Gin & Tonic, preparado con Roku Gin, la ginebra japonesa; o bien, pide una Tempus, la cerveza de doble malta, recomendación del chef Edo.
Un dato divertido es que debes depositar el palito de la brocheta en una vasija frente a ti conforme vayas comiendo cada yakitori. De esta manera, al final de la cena, puedes contar cuántas te comiste, y comparar con tus amigos o pareja. Una manera divertida de terminar la velada.
Hiyoko
- Dirección: Río Pánuco 132-B, Col. Cuauhtémoc, CDMX.
- Horario: lun. a sáb. de 12:30 a 23:00 hrs.
- Promedio: $1,000.00 a $1,200.00 por persona.