En el mercado hay una variedad de frutos naturales con diversos beneficios para la salud. Seguramente, en más de una ocasión has recurrido a remedios naturales para tratar malestares y un ingrediente que no te puede faltar es la bergamota.
De acuerdo con el Centro Nacional de Información Biotecnológica (NCBI), "bergamota" es el nombre común de la planta citrus bergamia. Es fácil reconocerla, ya que su cáscara es de color amarilla y verde, y mide lo mismo que una naranja.
Otra característica peculiar de este cítrico es su textura rugosa. Pero más allá de su aspecto, destaca por sus múltiples propiedades médicas que se han convertido en el objeto de estudio de la comunidad científica.
Leer también El té que baja los triglicéridos y el colesterol
Según el NCBI, los análisis realizados a la bergamota han arrojado que es un alimento efectivo para prevenir enfermedades clínicas, al mismo tiempo que aporta los siguientes beneficios al organismo:
La bergamota tiene un efecto hipolipemiante asociado con "reducciones significativas en los biomarcadores utilizados para detectar el daño oxidativo vascular". De esta manera, protege al cuerpo de los radicales libres para mejorar la salud del corazón y el metabolismo.
Además de su delicioso sabor, el cítrico reduce la sensación de hambre, ya que contiene polisacáridos y una fracción fibrosa-leñosa que provoca satisfacen el apetito. Por ello es común encontrarlo en suplementos alimenticios y productos dietéticos.
Una sola porción aporta flavonoides, vitamina C, ácido cafeico, ácido ferúlico y ácido clorogénico. Asimismo, contiene bajos niveles de sacarosa, lo cual la hace ideal para evitar la resistencia a la insulina y controlar la glucosa.
El aceite de bergamota tiene una acción antiséptica y cicatrizante, esto permite curar heridas sobre la superficie de la piel e impedir el paso de organismos contaminantes, como las bacterias.
La bergamota se puede encontrar en diversos productos, principalmente en aceites, cremas, shampoo y hasta en cápsulas de uso cosmético o alimenticio.
Dentro de la concina, podemos aprovechar esta planta para preparar infusiones y aliviar infecciones de parásitos, fiebre, diarrea o simplemente para relajar el sistema nervioso y disminuir el estrés.
Leer también Quiénes no deben comer pizza
Recibe todos los viernes Hello Weekend, nuestro newsletter con lo último en gastronomía, viajes, tecnología, autos, moda y belleza. Suscríbete aquí: https://www.eluniversal.com.mx/newsletters