La carne de caballo puede ser tan saludable como comer carne de res, cordero, cerdo o pollo, además su sabor es más dulce que otras, pero es más dura por lo que su cocción tendrá que ser lenta. Si tienes dudas de si comerla o no, aquí te decimos si es benéfico o dañino consumirla.
La carne de caballo es una excelente fuente de proteínas, contiene vitaminas del complejo B: B1, B2, B3, B6 y B12, aporta minerales esenciales como el hierro, el zinc, el fósforo y el magnesio.
Los beneficios que aporta al cuerpo son:
- Es baja en calorías, pues cada 100 gramos contiene 120 calorías.
- Combate la anemia al ser una excelente fuente de hierro.
- Contribuye en la producción de glóbulos rojos .
- Es buena para el sistema nervioso .
- Su consumo refuerza las defensas.
- Es buena para la salud y belleza de la piel .
- Es buen alimento durante el embarazo .
- Combate la fatiga.
- Su aporte en colesterol y ácido úrico es menor al que contiene la carne de vaca y de cerdo.
Entre las carnes rojas, se sabe que la carne de caballo contiene altos niveles de ácidos grasos insaturados, como los ácidos grasos α-linolénico y monoinsaturados, lo que indica que el consumo de carne de caballo puede ser beneficioso para la salud.
Además la grasa de caballo también se ha utilizado como crema para la piel y como medicina tradicional para enfermedades de la piel y curación de heridas, especialmente quemaduras.
Es imprtante destacar que a pesar de los beneficios aquí citados es importante saber dónde se compra dicha carne, la procedencia de los animales para evitar alguna enfermedad o toxicidad que ponga en riesgo la salud.
Fernanda Alvarado
es especialista en nutrición y educadora en diabetes, escribe la sección “Zona Saludable” en el suplemento impreso de Menú de El Universal. Cuenta con estudios de educación continua en nutrición y formación como promotora de salud por parte de la Universidad Iberoamericana. Candidata a maestría en nutrición y dietética con especialidad en nutrición comunitaria.