Hay alimentos que por encontrarse en malas condiciones salubres o por una mala preparación podrían ocasionar algunas enfermedades que son muy comunes. El secreto para evitarlas es estar pendientes de la calidad de lo que nos comemos.
Aquí las más frecuentes:
Salmonellosis
La bacteria de la Salmonella se almacena en los intestinos y torrentes sanguíneos (en casos graves), se transmite por el contacto con heces contaminadas o por consumir alimentos de origen animal infectados.
(Foto: Pixabay)
Entre ellos están la carne de pollo, res o pescado que no está bien cocida o está cruda ; huevos (también sin una cocción pertinente); leche y sus derivados. Pero los vegetales también pueden contagiarte en caso de que no estén desinfectados.
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Fuente: Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.
Botulismo
Se trata de una enfermedad derivada de la bacteria Clostridium botulinum que se contrae por heridas o alimentos enlatados que no tuvieron un procedimiento de envasado correcto. Aunque no es muy frecuente, puede causar daños en el sistema nervioso como visión borrosa, pérdida de los reflejos y dificultad para respirar.
Para identificar una lata infectada , revisa que las tapas no se vean inflada s, lo mismo con algunas comidas ya envasadas. Los alimentos no deben presentar olores extraños o colores anormales. Algunos recomiendan evitar las latas golpeadas a modo de prevención. También se puede llegar a encontrar en pescados salados y ahumados .
(Foto: Pixabay)
Fuente: Departamento de Salud de Nueva York, EUA.
Cisticercosis
Esta bacteria puede causar problemas estomacale s y en casos más avanzados genera quistes en el cerebro de las personas, esto se conoce como neurocisticercosis . La forma de contagiarse es comer carne de puerco que esté cruda, cocida o limpiada de manera inadecuada ya que pudo haber estado expuesta a heces humanas. Esto pasa en regiones donde la crianza de cerdos no es higiénica .
(Foto: Pixabay)
Fuente: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
E. coli
Las bacterias de este tipo afectan al aparato digestivo, principalmente, pero también las vías urinarias , causan enfermedades respiratorias y dañan el torrente sanguíneo dependiendo de qué tan avanzada este la infección.
(Foto: Pixabay)
Para prevenirlo, hay que evitar alimentos que estén contaminados y cocinar a la perfección las carnes y no consumirlas crudas si no conocemos su origen. Los jugos naturales deben evitarse en lugares donde la salubridad no se ve del todo adecuada. Lo mismo con el agua que no esté envasada como en algunos aviones o de la llave directamente.
(Foto: Pixabay)
Fuente: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Intoxicación con pescados y mariscos
Hay una intoxicación llamada ciguatera , ésta causa problemas digestivos, neurológicos y cardiovasculares. Se almacena en determinadas algas o dinoflagelados que son alimento para pequeños peces que, a su vez, son comida para especies más grandes que terminan por convertirse en un alimento para nosotros. Sin embargo, aunque esté bien cocido el pescado, la toxina sigue presente ya que es termoestable.
(Foto: Pixabay)
Otro padecimiento es el derivado por escombroides , una toxina que se genera a partir de la combinación de histamina y otras sustancias. Esta se libera una vez que el pez ha muerto y, si no se refrigera a tiempo y con la temperatura adecuada, su formación no se detiene. Los síntomas varían en cada cuerpo ya que se presenta como una alergia , puede ir desde un simple sarpullido hasta la contracción de las vías respiratorias.
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Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.