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Fuimos a probar los tacos madreados en la CDMX que se sirven en La Buena Barra, una cantina contemporánea que explora el territorio mexicano y transforma sus platillos clásicos; además combina la mixología con un menú que va desde la carne regia hasta los mariscos del Golfo. Nosotros visitamos la sucursal de Masaryk, Polanco.
Los tacos madreados se sirven en tortilla de harina que envuelve ribeye picante y desmenuzado en su jugo, acompañados de mini quesadillas de portobello y servidos en una cazuela.
Pero también probamos los sopecitos de tuétano, escamoles y ensalada a la mexicana, otro manjar para el paladar. Para adentrarnos en los platos fuertes, a recomendación del personal, pedimos el famoso taco de jaiba desnuda.
Proveniente de agua dulce de Veracruz, la jaiba estaba servida sobre una tortilla de maíz y una cama de perejil frito, bañada por un adobo de chile guajillo. A petición del chef, la probamos con 3 mayonesas: de habanero-zanahoria, de salsa macha y de serrano con cilantro y cacahuate. El sabor le hizo justicia a su popularidad.
Siguiendo con esa ruta de sabores marítimos del menú, elegimos un White sea bass: pescado sazonado con guajillo, paprika, aceituna y mayonesa. Al estar servido sobre una tabla de cedro, la carne adquirió un toque ahumado que nos remontó a la gastronomía casera, junto con un arroz rojo.
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Para poner a prueba los sabores dulces, ordenamos el Octopus hug, un preparado de ginebra, curaçao, cítricos y arándano. Lo más divertido fue la burbuja de jabón comestible sobre el vaso, aromatizada con frutos rojos, que reventamos con una paleta de mora.
También pedimos el Olaf, un coctel de mezcal servido en un cuerno escarchado que mantuvo la bebida fría durante toda la comida. Lo alternamos con tocineta y plátano macho. Fue toda una experiencia vikinga.
Para cerrar con broche de oro, probamos el volcán de dulce de leche servido con cajeta y una bola de helado de cardamomo que atenuó el dulzor, llegó a nuestra mesa con una mezcla de nitrógeno líquido y espuma de avellana. La combinación de temperaturas fue una explosión en el paladar.
La Buena Barra forma parte de Grupo Barra: una compañía que comprende el bar Doble B, enfocado en coctelería y la Gran Barra, especialista en platillos mexicanos; pero la cantina tiene lo mejor de ambos.
Si planeas ir, considera que el ticket promedio por persona es de $1,700 y puede incluir entrada, plato fuerte, un cóctel, una segunda bebida y el postre.
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