Utilizadas en la preparación de diferentes platillos o como botana, las salchichas son uno de los productos más solicitados y consumidos por los mexicanos. Debido a ello muchas marcas dedicadas a la elaboración del embutido circulan en el mercado . Sin embargo, algunas de ellas son engañosas pues, advirtió la Profeco , no están hechas de lo que indican. Pero entonces ¿qué es lo que estamos comiendo?
Para reducir costos de producción, o mejorar la presentación del producto y hacerlo más atractivo, las marcas utilizan otro tipo de ingredientes además de los que se declaran en sus empaques . Muchos son componentes que el consumidor desconoce, y no están a la vista del ojo común.
Es por ello que la Procuraduría Federal del Consumidor ( Profeco ) se dio a la tarea de analizar diversas marcas de salchichas para saber cuál es su composición real y verificar si algunas ocultan o mienten sobre los elementos de los que están hechas. Entre las conclusiones descubrió que existen varios casos en que el etiquetado no es veraz.
La Profeco advirtió sobre las marcas de salchichas en cuya constitución no predomina la carne. En su laboratorio, la Procuraduría encontró la verdad: muchas de ellas están hechas más de agua y almidón.
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La Profeco indica que, al menos en el papel, las salchichas deberían estar hechas a partir de la carne de ave , res o cerdo , agregando otros ingredientes , como grasa o vísceras de animal. Una vez molidos se suman a la fórmula especias, condimentos, sales y aditivos como el nitrito de sodio, fosfato de sodio o eritorbato de sodio.
Las salchichas se clasifican de acuerdo con el ingrediente que predomina, y la presentación ofrecida. En cualquier supermercado una persona puede encontrar salchichas de pavo , para hot dog, para asar, tipo viena o cocktail, entre otras.
El estudio realizado por la Profeco puso en la lupa a 57 marcas de salchichas disponibles en los supermercados y otros comercios, evaluando su información mostrada al consumidor en relación con la norma NMX-F-065, y basándose en parámetros como la calidad sanitaria, tipo de carne , grasa , fécula, sodio , humedad, proteína y etiquetado.
Para sorpresa de los consumidores, por lo menos 30 marcas cayeron en desinformar sobre los valores nutrimentales de los que están hechas las salchichas , incluso algunas en su composición, pues más que carne contienen una gran cantidad de almidón , ingrediente que ayuda a conservar y dar a este producto un aspecto esponjoso y de mayor tamaño.
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Además 28 productos contienen menos proteína que la establecida por la norma de la Profeco (poseen valores mínimos del 9.5%). Y no solo eso, todas las salchichas arrojaron tener cantidades excesivas de sodio .
Las salchichas que destacan en esta lista por tener más cantidad de agua que de otros ingredientes son: Casa López, que tiene un 74% de agua en su interior, y Peñarada, cuyo nivel es del 50%.
Otras marcas que poseen más agua y almidón en su composición son: Aurrerá, Chero, D’Héctor, Don Fer, Duby, Línea Roja, Pery y Precísimo, marcas económicas, pero bajas en su aporte nutrimental .
Las salchichas que en sus empaques indican ser de pavo , pero no están hechas de esa carne son: San Millán, Parma Sabori y Tres Castillos. Y las que se componen de más pollo que pavo fueron: Aurrerá, Burr, Capistrano, Great Value, Línea Roja, Pery, Parma Campestre y Precísimo.
Por último, la marca que más engaños cometió en su información nutrimental es la de Fud, Cuída-t, que dice ser producto derivado del pavo , pero también contiene pollo , además de exceso de sodio y de grasa , cuando en su empaque indica tener cantidades reducidas.
Más allá de los engaños en los empaques de las marcas de salchichas, la Profeco recomendó a los consumidores analizar los aportes nutrimentales de los productos que llevan a casa, además de monitorear constantemente los precios. Asimismo, por el riesgo que representa consumir grandes cantidades de sodio , la sugerencia es reducir los embutidos en la dieta general, sobre todo en personas con hipertensión arterial.
Como último consejo , la dependencia gubernamental recomendó revisar que los empaques se encuentren en condiciones aceptables de refrigeración , pues todas las salchichas analizadas resultaron ser aptas para su consumo y libre de patógenos, siempre y cuando se conserven en buen estado.
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