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Con las fiestas decembrinas llegan esas entrañables reuniones con familia y amigos, verdaderas comilonas en las que disfrutamos de deliciosos platillos y brindamos por los recuerdos compartidos, la alegría del presente y los sueños que traerá el año nuevo.
De fondo resuenan las notas festivas de las canciones de temporada, entrelazándose con el delicado tintineo de las copas que chocan al unísono, rebosantes de deseos de salud y prosperidad.
Botellas de vino se descorchan una tras otra, mientras una infinidad de cócteles, relucientes con destellos dorados y plateados, llegan sin cesar a las mesas.
Es fácil dejarse llevar por la emoción de la temporada y perder la cuenta de los tragos entre charlas animadas y abrazos. ¿Cuántos son demasiados?
En Menú te contamos qué es un trago estándar y cuántos tragos puedes beber sin excederte.
Antecedentes históricos del trago estándar
De acuerdo con el libro El trago estándar en México, distintas civilizaciones han buscado regular el consumo de alcohol para prevenir sus excesos desde tiempos remotos. Las primeras leyes escritas sobre bebidas alcohólicas, como las del reino de Hammurabi en Babilonia (1750 a.C.), ya establecían normas sobre la venta, medidas y responsabilidades de los comerciantes, mientras que en la antigua Grecia y Roma, pensadores como Platón y Séneca debatieron sobre la moderación y los límites en el consumo de vino, mientras objetos como la enigmática "Copa de Pitágoras" simbolizaban el castigo por excederse.
Asimismo, en el México prehispánico el consumo de pulque estaba vinculado a rituales religiosos por lo que estaba rigurosamente regulado. Los Mexicas castigaban severamente el abuso del alcohol, aunque permitían su uso en festividades específicas, entre los ancianos o con fines medicinales.
Con la llegada de la conquista, los controles prehispánicos se diluyeron, resaltando la necesidad de establecer medidas más claras para evitar los daños asociados al consumo excesivo de alcohol.
Como vemos, el esfuerzo por regular y moderar el consumo de alcohol ha sido una tarea persistente en diferentes culturas, evolucionando según las necesidades y valores de cada sociedad.
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¿Qué es un trago estándar?
El concepto de trago estándar surge de la necesidad de establecer una medida uniforme para la cantidad de alcohol puro entre diferentes tipos de bebidas, independientemente de su volumen o presentación. Así, una lata de cerveza, una copa de vino o un trago de licor pueden equivaler en términos de alcohol, siempre que se respeten las proporciones adecuadas.
Sin embargo, el valor de trago estándar o Unidad de Bebida Estándar (UBE) es variable porque no existe una definición uniforme a nivel mundial. Por ejemplo, en Austria, tres tragos estándar de 20 gramos cada uno equivalen a seis tragos en Suiza, donde cada uno tiene 10 gramos.
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¿Cuánto es un trago estándar en México?
En nuestro país, la NOM-047-SSA2-2015 y NOM-142-SSA1/SCFI-2014, establecen el valor de un trago estándar en 13 gramos o 16.56 ml de alcohol puro. Esta cantidad de alcohol se encuentra normalmente en una lata de cerveza, un caballito con tequila o una copa con vino.
¿Cuántos tragos puedes beber sin excederte?
La NOM-047-SSA2-2015 establece los parámetros para un consumo de alcohol de bajo riesgo, recomendando que los hombres mayores de 18 años no excedan más de un trago estándar por hora, 4 tragos estándar en una ocasión (24 horas) y 12 tragos por semana; mientras que las mujeres adultas no deben exceder un trago estándar por hora, 3 tragos estándar en una ocasión (24 horas) y 9 tragos por semana.
¿Cuántos tragos necesitas para emborracharte?
Por lo tanto, un hombre adulto podría emborracharse al exceder un trago estándar por hora o más de 4 tragos estándar en una ocasión, mientras que una mujer adulta podría emborracharse al exceder un trago estándar por hora o 3 tragos estándar en una sola ocasión.
Sin embargo, es importante recordar que la cantidad de tragos necesarios para emborracharse varía según factores individuales como el peso, la edad y el metabolismo de cada persona.
Por eso, en esta temporada decembrina, te recomendamos disfrutar con moderación y ser consciente de tus límites para evitar riesgos a tu salud.
