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El aceite vegetal es un ingrediente esencial en la cocina pero debes asegurarte de que esté en buen estado para que no arruine tus platillos con el desagradable sabor a rancio que adquiere con el tiempo.
La duración de los aceites en condiciones óptimas no solo depende del tipo u origen de la grasa, si no que también influyen factores como el almacenamiento.
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¿Cuál es la vida útil del aceite vegetal?
Los aceites provienen de distintas fuentes como cereales, semillas, vegetales, entre otras.
En el caso de los aceites vegetales , estos pertenecen a la clasificación de grasas insaturadas, las cuales tienen como característica el mantener un estado líquido a temperatura ambiente, además de que su consumo favorece a la disminución de colesterol en sangre.
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A su vez, las grasas insaturadas se dividen en monoinsaturadas y poliinsaturadas. Para determinar el tiempo de vida útil de los aceites vegetales es necesario saber si se trata de un aceite mono o poliinsaturado,
Algunos de los aceites vegetales monoinsaturados más populares son el de oliva, de canola, soya, cacahuate, almendra y aguacate.
La vida estándar de los aceites vegetales monoinsaturados es de hasta un año desde su apertura. Siempre es recomendable hacer caso a la caducidad marcada por el fabricante, sin embargo, estas fechas no evitan que el aceite se deteriore antes de lo estipulado.
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Dentro de los aceites vegetales poliinsaturados, la lista incluye algunos como los de girasol, maíz, soya y semilla de uva, los cuales una vez abiertos, suelen durar alrededor de seis meses en estado óptimo.
¿Cómo evitar que el aceite se haga rancio?
Los cuidados que hay que tener para prolongar la vida útil de los aceites vegetales son sencillos pero muy importantes.
El mayor problema con los aceites es el enranciamiento , ya que modifica el sabor y aroma del producto y esto se refleja en el producto final al aportar características no deseadas.
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El enranciamiento sucede cuando los ácidos grasos entran en contacto con el oxígeno, se trata de un proceso natural de oxidación, en el que se degradan los componentes dando lugar al cambio de las características del aceite.
Este proceso es similar a la descomposición que sucede en otros alimentos y aunque es inevitable a largo plazo, hay maneras de retrasar el enranciamiento .
Los aceites vegetales son sensibles a la luz, por ello es común ver que algunas de las botellas en las que se comercializan son color verde o ámbar. La recomendación es mantener el aceite en un lugar donde no esté expuesto a la luz constante.
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Otro cuidado importante es asegurarse de que el contenedor del aceite esté tapado, para evitar que entre aire y el oxígeno no cause una oxidación prematura.
Por último, es recomendable que cualquier aceite se almacene en un lugar fresco y libre de humedad, pues las altas temperaturas contribuyen a que aparezca el sabor a grasa rancia .
