Las infusiones, de cualquier hierba, tienen beneficios a la salud muy variados, sin embargo, cuando comienzas a juntarlas, puedes crear y obtener resultados apropiados para distintas partes del cuerpo, así como para afectaciones o ligeros malestares.

Esta vez, en te presentamos la infusión de lavanda y menta, ideal para desinflamar, relajar y disfrutar por su gran aroma. Conoce los beneficios.

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Infusión de lavanda y menta. Foto: Mareefe / Pexels
Infusión de lavanda y menta. Foto: Mareefe / Pexels

Desinflamatoria

Gracias a los taninos que contiene la lavanda, permite desinflamar ciertas partes de nuestro cuerpo. Aunque el uso principal suele ser para aliviar la inflamación estomacal, la lavanda ayuda frente a inflamaciones musculares, dérmicas como los granitos y hasta bucales, beneficio que comparte con la menta, al ser un gran astringente y ayudar frente a problemas en la boca.

Alivia problemas intestinales

Al ser desinflamatoria, la lavanda alivia ligeros problemas estomacales como la hinchazón. La menta también alivia los malestares digestivos al promover la eliminación de gases. Así, evita las flatulencias y regula la acidez estomacal, así como las nauseas.

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Infusión de lavanda y menta. Foto: Pixabay / Pexels
Infusión de lavanda y menta. Foto: Pixabay / Pexels

Beneficia la mucosa respiratoria

La menta es lo que destaca en este sentido ya que es ideal para descongestionar las vías respiratorias detrás de un resfriado o gripe debido a sus propiedades expectorantes. De esta manera promueve la buena respiración.

Previene padecimientos cardíacos

Esta infusión contiene teofilina, una substancia que tiene un efecto estimulante de la circulación y relajante muscular. Esto permite que el flujo de la sangre sea continuo y evita padecimientos cardíacos como la hipertensíon o infartos.

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¿Cómo preparar infusión de lavanda y menta?

Infusión de lavanda y menta. Foto: Ahmed Aqtai / Pexels
Infusión de lavanda y menta. Foto: Ahmed Aqtai / Pexels

Ingredientes

  • 1 cdta. de flores de lavanda
  • 1 cdta. de hojas frescas de menta
  • 1 tza. de agua

Preparación

  1. Pon a calentar la taza de agua hasta el punto de ebullición.
  2. Cuando rompa el hervor, agrega las flores de lavanda y las hojas de menta.
  3. Deja infusionar de 5 a 10 minutos.
  4. Cuela y sirve en tu taza favorita y disfruta.
  5. Puedes agregar miel si deseas endulzar, pero no es necesario.

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Así de sencillo tienes una infusión con muchos beneficios para tu estómago y hasta tu mente, ya que la lavanda es conocida por sus propiedades relajantes. De paso, tendrás un gran aliento debido a las propiedades astringentes de la menta. Recuerda que esto no sustituye el tratamiento médico y es mejor acudir a un ante cualquier padecimiento.

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