La pancita, también conocida como menudo o mondongo, es un platillo típico de la gastronomía mexicana. Recibe diferentes nombres porque se prepara de varias maneras a lo largo de la República Mexicana. Se dice que es una "comida para valientes", pues su aroma no es precisamente del agrado para todos.
¿Cómo disminuir su olor? En Menú te compartimos algunos consejos para lavar la pancita y que quede con su mismo sabor exquisito.
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¿Cómo quitarle el mal olor a la pancita?
La pancita proviene principalmente de la res, aunque en algunos estados también se utiliza la pancita de borrego. Por lo general, es muy difícil de limpiar porque su color natural es de tono oscuro o gris y, después de limpiarla, su carne consigue el distintivo blanco con el que la encontramos en los mercados.
Hay diversos ingredientes que pueden neutralizar su olor, pero uno de los más efectivos es el vinagre blanco. Dicho producto tiene un sabor ligeramente ácido, lo que permite reducir el aroma de la pancita y conservar su sabor. Para mayor eficacia, se recomienda combinarlo con un toque de jugo de limón, cítrico que descompone el hedor.
¿Cómo emplearlo? Primero deberás colocar la pancita en un recipiente y llenarlo con 1 taza de vinagre blanco con el jugo de un limón bien. Deja que repose toda la noche y después enjuágala con agua fría. Finalmente, llévala a una olla exprés junto con poro, ajo, pimienta, laurel, sal de grano, chile serrano y zanahorias para cocinarla.
La combinación de estos ingredientes fuertes reducirá el olor de la pancita. Posteriormente, retira el caldo y corta el exceso de grasa, así como las partes grises que puedan quedar.
Por otro lado, la Chef Eva -del canal de YouTube "Q ricas recetas"- comparte un secreto para darle un aroma diferente a la pancita. Consiste en colocarla (previamente lavada) en un recipiente con agua, 1 cebolla entera, 1 ajo entero, 2 hojas de laurel, 1 cucharada de sal, 1/2 cucharada de comino molido y 1/2 cucharada de orégano.
Luego deberás cocinarla durante 2 horas. ¿Qué efecto tendrá? El comino y el orégano van a desprender un aroma delicioso, dotando a la pancita de un sabor suave y especiado.
¿Por qué es bueno comer pancita?
De acuerdo con la doctora Janeth Ventura, de la Asociación Mexicana de Ciencias y Alimentos (AMECA), comer pancita es nutritivo porque tiene poca grasa. Además, es fuente natural de proteínas miofibrilares (como la actina y la miosina), contiene colágeno y elastina, mismas que ayudan a mantener la salud de la piel, los huesos y cartílagos.
¡No tengas miedo de cocinarla! La pancita es un platillo que vale la pena disfrutar.
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