El jengibre se ha vinculado a beneficios para la salud como bajar los niveles de colesterol en la sangre, tratar la indigestión, reducir las náuseas, la inflamación y el dolor muscular, señala el sitio especializado Healthline.
Esta raíz se puede usar como condimento para todo tipo de platillos y guisados, para preparar postres o hacer tés.
Si compraste demasiado jengibre o simplemente quieres conservarlo durante un largo periodo, aquí te compartimos algunos tips para mantener su frescura.
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El primer paso para mantener tu raíz de jengibre durante más tiempo es comprar un trozo fresco. The Spruce Eats recomienda elegir una pieza cuya piel no presente arrugas. Revisa los extremos para detectar manchas de moho.
Si ves arrugas o se siente aguada al tacto, lo mejor será que escojas otra raíz . En caso de que ocupes el jengibre en el plazo de una semana, bastará con guardarlo en una bolsa de papel dentro de tu refrigerador.
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Para un almacenamiento más largo, el blog gastronómico The Kitchn señala que la mejor manera de conservar el jengibre es guardarlo en una bolsa con cierre hermético, sacar todo el aire, cerrar y ponerla en el cajón de las verduras de tu refrigerador.
Es recomendable que la raíz no esté pelada. Si alguna parte del jengibre ya está cortada, sécala muy bien con una toalla de papel y después almacena.
La revista Good Housekeeping asegura que este truco mantendrá el sabor y la textura del jengibre durante meses. La próxima vez que utilices este ingrediente , solo debes cortar la cantidad deseada y volver a sellar dentro de la bolsa.
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Si quieres congelar el jengibre , The Spruce Eats aconseja que lo coloques en una bolsa o recipiente hermético apto para meterse en el congelador. De esta manera, evitarás que la raíz tenga quemaduras provocadas por el frío.
No es necesario que lo peles o lo cortes antes de guardarlo, no obstante, si es muy grande o ya conoces el tamaño de las piezas que requieres al cocinar, puedes hacerlo. El jengibre congelado es más fácil de rallar, así que no necesitas descongelarlo.
Otra manera poco usual de conservar el jengibre es sumergirlo en vodka o jerez. Según All Recipes, esta técnica se sugiere para el jengibre ya pelado.
Remueve las áreas secas o manchadas, después coloca la raíz en un frasco y rellena con alcohol hasta que cubra completamente el jengibre . Tapa el frasco y almacena dentro del refrigerador.
Cuando lo utilices, solo saca el jengibre, sécalo bien y corta la parte que requieras. The Spruce Eats recomienda que deseches la raíz si el alcohol comienza a verse sucio. Esta es una señal de que hay moho o bacterias.
Usa estos tips para sacarle el máximo provecho a este ingrediente.