La alimentación va más allá de un acto para acabar con el hambre. El comer no solo nos permite disfrutar de experiencias y alimentos, también es un factor clave para tener un cuerpo saludable y nutrido.
A través de lo que comemos es como el organismo obtiene los nutrientes necesarios para llevar a cabo todas las funciones biológicas, desde las más sencillas hasta las más complejas.
La salud no solo abarca el bienestar biológico, también debe hablarse sobre la salud mental, pues es un pilar importante para la integridad de las personas. Además de prácticas como acudir a psicólogos, psiquiatras y demás especialistas de la salud mental, es posible mejorar aspectos como el estado de ánimo con ayuda de los alimentos.
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Convertir la alimentación correcta en un hábito es una forma de impactar en aspectos cognitivos, tales como el estrés y la ansiedad. Tal es el caso de la alcachofa , una verdura sencilla de encontrar en tiendas y supermercados.
Las alcachofas son una excelente fuente de magnesio. Este mineral es un nutriente que ha demostrado a través de investigaciones clínicas que ayuda a calmar la mente durante periodos de estrés o ansiedad.
De acuerdo con la Dra. Uma Naidoo, especialista en psiquiatría nutricional, a partir de tan solo un apieza de alcachofa puede obtenerse alrededor del 27% de la ingesta diaria recomendada de folato, una vitamina del grupo B la cual está relacionada con una mejor función de los neurotransmisores, que a su vez optimizan la capacidad de concentración, además de ayudar a reducir la sensación de estrés y sus síntomas.
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Dentro de las alcachofas también se encuentran las vitaminas C y K, nutrientes importantes para el correcto funcionamiento del organismo, ya que actúan como antioxidantes directamente en el cerebro, lo que ayuda a reducir la inflamación neurológica. Esto se ha asociado con síntomas de estrés y ansiedad mucho menores.
Para añadir la alcachofa a tu alimentación y convertirla en una aliada para tu salud general y en particular, para tu salud mental, puedes consumirla asada directamente al fuego o cocida al vapor. Una vez suave, puedes retirar cada una de las hojas para comer únicamente la pulpa carnosa de la base se estas.
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También puedes limpiar la alcachofa retirando las hojas y el tallo, para obtener el corazón y agregarlo a ensaladas o guisos. Te recomendamos acompañarla de aceite de oliva, jugo de limón y otros ingredientes buenos para tu salud.
Este vegetal conserva sus propiedades en su presentación enlatada, por lo que puedes tenerla en tu alacena para utilizarla cuando quieras y darle a tu cuerpo los nutrientes que necesita para días libres de estrés.
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