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Conocer el valor nutrimental de lo que comemos es casi tan importante como conocer las leyes o tus derechos, de otra manera ¿cómo podrías saber realmente qué es lo que te estás comiendo? ¿cómo sabrías si te está haciendo bien o mal? y ¿cómo descubrir cuántas porciones podrías o más bien, debes comer? La única forma de conocerlo es leyendo las etiquetas nutricionales que se encuentran al reverso de los empaques de alimentos.
De acuerdo con un artículo publicado por profeco.gob.mx las porciones que actualmente se consumen (en México y en el mundo) son infinitamente mayores a las que se consumían hace 20 años, lo que ayer correspondía a un menú adulto, hoy corresponden a un menú infantil. Sin duda, un gran cambio de porciones y calorías, lo cual aumenta la urgencia de saber leer las etiquetas.
Desde el 2015 la COFEPRIS , como parte de una estrategia de control de sobrepeso y obesidad , realizó una reforma sobre el etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas, por lo que ahora se incluye también un etiquetado frontal en los envases. Dicha etiqueta está diseñada de acuerdo a los lineamientos del GDA, Guideline Daily Amount o Guía de Alimentación Diaria. Este etiquetado nos permite conocer de manera sencilla, la cantidad de grasa saturada, otras grasas, los azúcares totales, el sodio y la energía calórica que aporta el total del envase y poder decidir de manera inteligente e informada, si consumes o no, un alimento o bebida.
Además, también podrás comparar las cantidades y porcentajes con aquellas recomendadas para una dieta de 2000 calorías diarias de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud .
