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De acuerdo con un artículo de Claudia Villalobos para la Gaceta Politécnica de finales de marzo, la investigación producida por una científica del Instituto Politécnico Nacional (IPN) dio como resultado un tratamiento ideal para pacientes con gastritis.
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Tuna roja y aguamiel para la gastritis
La doctora en Ciencias, Rosalva Mora Escobedo, del IPN, consciente de los efectos secundarios de los medicamentos para tratar la bacteria Helicobacter pylori (H. pylori), causante de la gastritis, empezó una investigación para conseguir un tratamiento inocuo para combatir la enfermedad. Es así como encontró en la tuna roja y el aguamiel una combinación saludable.
Según el artículo, la doctora Mora Escobedo creció en Contepec, región pulquera de Michoacán, por lo que, desde niña, ha tenido un acercamiento a los procesos de extracción a partir del agave, uno de ellos el aguamiel, que es la base para producir el pulque. También se menciona que la doctora "sabía que, por su uso en las culturas prehispánicas, es considerada como una bebida milagrosa". Lo mismo sucedió con la tuna, de la cual aprovechó sus propiedades benéficas para combinar ambos ingredientes y lograr una bebida que trate esta patología gástrica.
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Una investigación de 10 años
Las investigaciones antes de llegar al producto tardaron, alrededor de 10 años.
La científica de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) declaró que, para obtener el producto tuvo que detener la fermentación del aguamiel, para que no se hiciera pule, y ya mezclada con la tuna, se sometió todo a un proceso de pasteurización para que la bebida se mantenga en condiciones óptimas durante un mes en el refrigerador.
“Además de darle un valor agregado a productos endémicos de nuestro país, mediante este proyecto buscamos aprovechar las propiedades del aguamiel y de la tuna roja para tratar problemas de salud. Hemos observado efectos benéficos de la savia del maguey en la disminución de colesterol y triglicéridos en la sangre, asimismo examinamos que combinada con la tuna protege el estómago y ayuda a reducir los niveles de glucosa”, afirmó para el artículo.
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Los problemas de los medicamentos contra la gastritis
Según datos de la científica, “existen medicamentos que disminuyen la secreción de ácido clorhídrico y otros que inhiben su producción; sin embargo, la administración prolongada puede repercutir en la absorción no apropiada de los nutrientes”. Esto no sucede con la bebida que desarrolló, la cual, incluso protege el estómago y ayuda a reducir los niveles de glucosa.
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Beneficios del aguamiel y la tuna roja
El aguamiel, explicó, “contiene compuestos llamados fructooligosacáridos que funcionan como fibra soluble que no se digiere cuando pasa a través del estómago e intestino delgado y, por ello, llega casi intacta al colon, en donde favorece el crecimiento de las bacterias benéficas para la salud, las cuales inician el proceso de fermentación y contribuyen a la producción de Ácidos Grasos de Cadena Corta”. Estos pasan al torrente sanguíneo y generan efectos benéficos como la reducción de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre.
Respecto a la tuna, la investigadora explicó que “el fruto silvestre como el cultivado contienen las mismas propiedades, ya que tienen pigmentos muy similares. Su principal efecto se lo otorgan los compuestos fenólicos que poseen capacidad antioxidante”
Además, destacó un punto importante: el aguamiel por sí solo contiene una alta proporción de sacarosa y su consumo no es recomendable para personas diabéticas, sin embargo, se observó que, en conjunto con el jugo de tuna se mantienen los niveles de glucosa en sangre.
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Aunque se experimentó con heces humanas y ratones para verificar las propiedades de la bebida, aún faltan más investigaciones para combatir, a través de la bebida, la bacteria H. Pylori, que produce gastritis y, a la larga cáncer gástrico.
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