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Los rivales de México en la ronda de grupos saben que el gol y la portería bien pueden ser sinónimos de experiencia. Como Raúl Gutiérrez, los entrenadores de Alemania, Fiyi y Corea del Sur apostaron por reforzar con elementos mayores de 23 años esas posiciones.
La Mannschaft, primera contricante del Tri Olímpico en Río, eligió al ariete del Freiburg, Nils Petersen, para convertirse en el romperredes del equipo. Sin embargo, la portería la defenderá el juvenil Timo Horn [FC Koln].
Petersen estuvo, junto con equipo, en la Bundesliga 2, aunque para el próximo año el Colonia consiguió el ascenso al máximo circuito alemán.
“No convocamos a más jugadores, porque algunos tuvieron participaciones en la Eurocopa y quedamos en que a ningún club le convocaría a más de dos jugadores, porque no estamos en una Fecha FIFA”, explicó el seleccionador germano, Horst Hrubesch.
Fiyi, en apariencia el combinado más débil del sector, es un equipo que comienza a tomar roce internacional. Su futbol no es muy basto, ni desarrollado, por lo que su columna vertebral tiene que ver con elementos veteranos.
El ataque del país de Oceanía convocó a Roy Krishna, su máximo referente ofensivo [como si en México se tratara de Javier Hernández] para buscar la portería contraria en Brasil.
Este artillero de 28 años es el capitán de esa escuadra y actualmente milita en el Wellington Phoenix neozelandés que juega en la A-League de Australia.
El guardameta del cuadro fiyiano será un hombre de 34 de edad, Simione Tamanisau.
El caso de los sudcoreanos, a quienes el Tricolor enfrentará en el tercer encuentro de la primera fase olímpica, resulta sui géneris. Los asiáticos descartaron formar una columna vertebral, sino que se la jugarán con dos atacantes como sus puntales.
Suk Hyun-jun, artillero del Porto luso, ha tenido un desarrollo ligado a las selecciones inferiores de su país hasta llegar al nivel absoluto, en el que suele aparecer. Su carrera en Europa comenzó en el Ajax holandés y ha pasado por equipos portugueses como el Vitoria Setúbal y Nacional.
Son Heung-Min, del Tottenham Hotspurs, es el l otro atacante de Corea del Sur para los Juegos Olímpicos. Los asiáticos sí consiguieron el permiso para que sus europeos jugaran en la justa de Río 2016.
