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Industriales del sector acerero de México, Estados Unidos, Europa, Canadá y Latinoamérica pidieron a los gobiernos de sus países tomar acciones inmediatas y de carácter urgente en contra de las políticas y prácticas desleales que aplica China para la producción y exportación de acero.
Entre las peticiones está el discutir dentro de la Organización Mundial del Comercio el reconocimiento de China como economía de mercado, ya que hasta la fecha este país asiático no tiene esta categoría porque “no supera la prueba de serlo”, puesto que es dominada por un Estado vertical.
Organismos como la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero), el Instituto del Acero de Brasil, la Asociación Europea del Acero, el Instituto Americano del Hierro y del Acero, la Asociación de Productores de Acero de Turquía, la Asociación de Productores de Acero de Canadá, la Industria Especial del Acero de Norteamérica y el Comité de Importación de Tubería y Ductos aseguraron que la sobrecapacidad de China, estimada en hasta 425 millones de toneladas, y la falta de una política eficaz para reducir esa situación son evidencia de que ese país asiático aplica políticas que dañan la competencia justa.
Recordaron que el problema que vive la industria mundial del acero tiene que ver con la sobrecapacidad de China, el bajo crecimiento económico, la menor demanda de acero y las condiciones desleales de comercio con el que se intercambian los productos siderúrgicos.
“El mayor peso recae sobre China, cuya sobrecapacidad significativa y creciente en tiempos de bajo crecimiento ha desestabilizado el mercado global del acero y sus flujos comerciales”, afirmaron dichas organizaciones en un comunicado que encabezó la Alacero.
Las exportaciones de acero asiático crearon una nueva normalidad que se caracteriza por un dramático incremento de las importaciones de acero en condiciones desleales de comercio, lo que alimenta la sobrecapacidad global, afirmaron las organizaciones.
Explicaron que la misma Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) se pronunció en contra de la creciente ola de exportaciones provenientes de industrias o compañías siderúrgicas propiedad del Estado, como las firmas asiáticas.
Recordaron que la OCDE ya emitió su punto de vista en torno a la urgencia que hay de tomar acciones para enfrentar las prácticas desleales.
Desafíos. Precisamente, así fue como se manifestó en la declaración del presidente del Comité de Acero de la OCDE, Risaburo Nezu, quien aseguró que “los desafíos estructurales deben abordarse con urgencia en medio de esta nueva era caracterizada por el bajo crecimiento de la demanda de acero y por el aumento de las exportaciones”.
Nezu consideró que se fracasó en el intento por detener las distorsiones del mercado como consecuencia de que las empresas privadas tienen que competir con firmas que son subsidiadas y apoyadas por el Estado.
El problema es que los precios de los productos del acero han tenido caídas de más del 50%, como es el caso del planchón, además de otros productos como la placa y la lámina rolada en frío y en caliente, y muchos más.
