La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, convocó ayer por sorpresa a elecciones anticipadas para el 8 de junio, argumentando la falta de unidad del Parlamento sobre la salida del país de la Unión Europea (UE), conocida como Brexit.
“Necesitamos elecciones generales y las necesitamos ahora”, dijo May en un mensaje desde Downing Street. Agregó que la petición de elecciones era a “regañadientes”, pero reconoció que son escenciales para “garantizar el liderazgo fuerte y seguro que necesita el país” en los dos años de negociaciones que vienen con Bruselas.
El siguiente paso es la aprobación del Parlamento, que se pronunciará hoy y se espera que sea sólo un trámite.
May se enfrenta a todas las complicaciones que lleva aparejadas el Brexit. Por eso quiere garantizar y aumentar el respaldo dentro de su partido mediante nuevas elecciones.
Para la salida de Reino Unido de la UE May ha planteado la opción conocida como “Brexit duro”, que implica dejar el mercado común europeo, la unión aduanera y el Tribunal de Justicia. Sin embargo, su plan para lograrlo se enfrenta a fuertes voces críticas a las que necesita desactivar.
Sus opciones para salir victoriosa de las elecciones no son malas, ya que los conservadores van muy por delante de los laboristas en las encuestas.
El Partido Laborista está profundamente dividido. Los críticos dicen que su presidente, Jeremy Corbyn, es un líder débil y le acusan de no haber sido contundente en su rechazo al Brexit.
No obstante, Corbyn fue el primero en salir a celebrar el anuncio de May.
“Saludo la decisión de la primera ministra de dar al pueblo británico la oportunidad de votar por un gobierno que dé prioridad a los intereses de la mayoría”, expuso en un comunicado.
“El Partido Laborista ofrecerá al país una alternativa efectiva al gobierno”, prometió Corbyn.
La tercera fuerza parlamentaria, los independentistas escoceses del Partido Nacional Escocés (SNP), criticaron la convocatoria.
Nicola Sturgeon, jefa del gobierno regional escocés, señaló que May pretende “escorar al Reino Unido a la derecha, imponer un Brexit duro , más recortes sociales”, y “aplastar a la oposición”.
Por su parte, la Unión Europea (UE) indicó que mantiene sus planes en las negociaciones del Brexit. “Las elecciones británicas no modifican los planes de la UE a 27”, dijo a la AFP Preben Aamann, portavoz del presidente del Consejo Europeo, quien reiteró que el siguiente paso es la cumbre de líderes, el 29 de abril, para adoptar las grandes líneas de negociación de la salida de Reino Unido.
“A continuación, [esperamos tener] listas las directrices de negociación del Brexit el 22 de mayo”, lo que “permitiría a los 27 comenzar las negociaciones”, indicó Aamann, quien reiteró así el calendario previsto por los europeos.
El diario británico The Thelegraph explicó ayer en un artículo que, aún en el caso de que May llegara a perder las elecciones, el Brexit no se detiene porque fue una decisión que se tomó en un referéndum y sólo otro referéndum podría revertirla.
Para que un partido convocar al referéndum necesitaría no sólo ganar la mayoría de asientos en la cámara de los Comunies, sino de número de votos en todo el país, “algo que ningún partido ha logrado desde antes de la Segunda Guerra Mundial”, precisó el diario.
Al poco del anuncio de May, el Fondo Monetario Internacional aumentó medio punto, hasta el 2%, su previsión de crecimiento para el Reino Unido en 2017. Sin embargo, la bolsa de Londres cerró con una caída del 2.46%.