El centrocampista del Barcelona, Andres Iniesta, considera que Lionel Messi es "un jugador fundamental" para el equipo y confía en que salga en el once titular, en el clásico del próximo sábado, en el Bernabéu, ante el Real Madrid.
"Si entra en la lista es porque puede participar, ya sea de inicio o estando en el banquillo. Pero si cuento con Leo de inicio, las posibilidades aumentan para mi equipo", ha argumentado hoy en rueda de prensa.
Iniesta no había coincidido con el astro argentino durante la última semana, al estar convocado con la selección española, pero a a la vuelta se ha llevado una grata sorpresa.
"Lo he visto poco entrenar estos días, pero las noticias son muy buenas, pues está entrenando con nosotros y la sensaciones parece que son buenas", ha explicado.
Con Messi o sin él, el jugador ha repetido varias veces que el Barça deberá hacer "un partido casi perfecto" para ganar en el Bernabéu.
"Decir que el Madrid es más débil sería temerario y no es nuestro pensamiento. Tiene muchas virtudes que pueden hacernos daño y, en su estadio, te exige que hagas todas las cosas bien", ha advertido.
Además cree que presentarse al clásico con tres puntos de ventaja en la clasificación no significa nada. "Llegar con esos tres puntos puede confundirnos. Lo que tenemos que hacer es salir con la idea de ampliar esa ventaja", ha indicado.
El centrocampista azulgrana ha dado la receta para lograrlo: "Si hay una cosa que debemos tener clara es que tenemos que ser nosotros mismos, mantener nuestra ida de juego, intentar ser protagonistas con el balón y dominar el partido el mayor tiempo posible, estar organizados y no cometer errores que ellos puedan aprovechar".
En cualquier caso, Iniesta tiene claro que "aun es muy pronto" y que el resultado del clásico "no será determinante" para conquistar el título de Liga. Eso sí, en su opinión, una victoria ante el eterno rival siempre tiene "una trascendencia emocional importante".
Este será el primer clásico que Iniesta viva como capitán del Barcelona, algo que considera "una anécdota". Además, desde el adiós de Xavi Hernández, ha pasado a ser el azulgrana con más clásicos a sus espaldas, pues el sábado jugará el número 32 de su carrera.
"Este tipo de partidos me encantan por lo que son y lo que transmiten. Ojalá me sigan poniendo como una moto", ha comentado con timidez, la que no tuvo su compañero Gerard Piqué hace unos días, cuando reconocía que los partidos entre el Real Madrid y el Barça le ponían "cachondo".
El centrocampista vivió hace pocos días las suspensión del Bélgica-España por la posibilidad de que se produjera un ataque terrorista como los de París, "una medida totalmente acertada cuando no tiene la máxima seguridad", ha opinado.
Estos días ha podido comprobar que se está hablando más del clásico por todas las medidas de seguridad que rodearán el encuentro y por el miedo a un atentado que por el fútbol.
"Esta situación genera intranquilidad a todo el mundo, es inevitable. Es una lástima que no se hable de deporte, fútbol o espectáculo, pero es la realidad que vivimos y no se puede esquivar. A partir de ahí, que todo vuelva a poco a poco normalidad, porque quiero recordar que el sábado no solo se juega el Madrid-Barça sino muchísimos partidos", ha sentenciado.