La sudadera de Don Felipe refleja su jornada: por las mañanas se le ve por los pasillos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, antes de entrar a clases, y por la tarde vende frutas y verduras en la central de abastos de la capital o en el tianguis de Tepeaca.
Don Felipe obtuvo más de 400 puntos en el examen de ingreso a la BUAP, en el que participaron más de 450 aspirantes
Don Felipe está agradecido por lo que ha recibido, como una laptop y una mochila, la cual prefiere no usar
Los maestros no le brindan atención especial, pues aseguran que "está atento a las clases y escucha bien". Su maestro de marketing incluso admite que ve mejor que otros estudiantes
El encargado de atender a los estudiantes de ingeniería sigue su paso y detrás de él revolotea un grupo de jóvenes que se funde con otros alumnos que esperan a Hernández en su oficina
Apenas estudió hasta la secundaria y hace más de seis décadas sabía hacer cuentas muy bien, lo que fue afinando en sus distintos trabajos.