Joaquín Pardavé, el cómico de la Época de Oro
Joaquín Pardavé Arce fue uno de los mejores exponentes artísticos, poseedor de una gracia insuperable.
Nació en Pénjamo, Guanajuato, fue hijo del actor Joaquín Pardavé y de Delfina Arce, una cantante de zarzuela. Su carrera de actor la inició muy pequeño, ya que sus padres lo sacaban en brazos al escenario. Su primer papel lo obtuvo a la edad de cuatro años en la obra "La Cara de Dios".
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Se inició con la película “Jalisco nunca pierde” y terminó cuando ya estaban listas las tres cuartas partes del rodaje de “La virtud desnuda”. Creó en el cine, en el teatro, en la radio y en la televisión personajes inolvidables. Aquí con Elsa Aguirre.
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De acuerdo con la Sociedad de Autores y Compositores de México, en su juventud jugó fútbol, formando equipo con Roberto Soto hijo y Fernando Soto "Mantequilla". Tenía una fuerte personalidad y un carácter como pan dulce. Era extraordinariamente responsable.
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Se le recuerda como “Don Susanito Peñafiel y Somellera”, el “Baisano Jalil” y “Don Venancio”. Aquí unas carteleras publicadas en las páginas de EL UNIVERSAL.
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Como compositor tenía registradas 27 melodías, entre ellas, las que tanto se popularizaron como “Varita de nardo”, “Mi querido capitán”, “La Panchita”, “Negra consentida”, “No hagas llorar a esa mujer” y otras. Aquí junto a Pedro Infante.
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Participó en 208 filmes, de los cuales, en más de 40 fue director y actor y en las demás actor de primerísima línea, hasta el grado de que “se le dejaba hacer” porque se tenía confianza en que con sus improvisaciones oportunas se mejoraba mucho el “script”.
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