El Museo Internacional del Barroco, obra del Premio Pritzker 2013, Toyo Ito, ocupa 18 mil metros cuadrados de área construida.
El espacio aprovecha todas las condiciones de luz de la ciudad; cuenta con dos plantas con espacios que van de los siete a 23 metros de altura, en el cual hay generosas terrazas y patios.
Hay entre las salas del edificio pequeños espacios para descubrir concebidos de acuerdo con los temas artísticos de cada sala. Estos espacios han captado la atención de los espectadores que durante su recorrido se detienen a vivirlos y hacer una pausa en la visita.
Actualmente se pueden ver dos exposiciones temporales, "Lo que va y lo que no viene en la Nao" y "Marajás Barrocos", y la muestra permanente distribuida a lo largo de siete salas. En ellas se incluyen todo tipo de joyas barrocas, de las cuales más del 95% son préstamos de los museos citados y de colecciones privadas.
Tan solo en las exposiciones temporales el MIB tiene más de mil piezas, además de interactivos y grandes materiales gráficos que cierran todos los espacios.
La exposición de la Nao está integrada en gran medida por acervo del Franz Mayer (que será la segunda sede de esta muestra), así como por piezas de Rivero Lake. Es una muestra que enfatiza las rutas por el Pacífico hacia China, Filipinas e India.
En el espacio dedicado a la propia ciudad se puede ver una impresionante maqueta dividida en dos, que ocupa toda la sala, y que reproduce a detalle el centro de ciudad con sus iglesias, edificios civiles, colegios, hospitales, y que fue creada por Salvador Rodríguez.