Ante la pandemia por Covid-19 , Gabriela Martínez, yucateca de 58 años, elabora un cubrebocas pensado para la comunidad que se comunica a través de la lengua de señas en Mérida, Yucatán.
“La idea surgió a raíz de tomar un curso básico de lengua de señas para atender a mis alumnos, ya que también doy clases a hablantes nativos y los preparo para que presenten su examen del Ceneval. También, por si me llegaba algún alumno sordomudo. Afortunadamente, tuve la oportunidad de apoyar en época de pandemia creando los cubrebocas que ayudaran a una mejor comunicación en momentos complicados”, comentó Gabriela en una entrevista telefónica con EL UNIVERSAL.
Gabriela, quien es maestra de español para extranjeros, detalló los materiales que utilizó en el proceso de elaboración de cada pieza. “Los fabrico desde mi casa, utilizo botellas reciclables, tela de gabardina y elásticos. Marqué el trazo, lo pasé a la tela y la cubierta la coloqué por fuera, de tal manera, que por dentro tenga un buen acabado y no vaya a lastimar. Tengo varios diseños de diferentes telas y colores”, dijo la yucateca.
“Al convivir con discapacitados, ya te haces un poquito más sensible a las necesidades que hay, aunado a que unos de mis pasatiempos son la costura; aparte soy diseñadora gráfica y contaba con el tiempo y material necesario para elaborar cada modelo”, añadió Gabriela.
Asimismo, la yucateca aseguró que los cubrebocas son donados a una institución para personas que se comunican mediante señas. “Le propuse a un maestro de la asociación 'ASEY', la cual es una escuela de sordomudos de la ciudad, si quería que le hiciera unos cubrebocas. Hice mi muestra y le gustó mucho”.
“He donado alrededor de 250 cubrebocas”, agregó.
Sin embargo, también ha recibido apoyo de la asociación, pues le han donado diversos materiales para continuar ayudando. “El material que tenía ahorrado se terminó, pero una mamá de la asociación nos hizo favor de regalarnos unas telas; además, me trajo elástico y envases limpios de refrescos”.
Gabriela mencionó que, de igual manera, vende los cubrebocas con un costo de 40 pesos y se pueden adquirir mediante la cuenta de Facebook de dicha institución. “Ya se están comercializando con un costo de 40 pesos y es por medio de la asociación ASEY. También, a través de mi cuenta de Facebook: Gaby Martínez. Hacemos envíos a cualquier parte de la república".
Finalmente, la yucateca manifestó su deseo de seguir apoyando a la noble causa, pues confesó que ha recibido cometarios positivos sobre su ayuda. “Los niños están encantados, he recibido comentarios positivos por parte del maestro y ellos se alegran de poder mirar la gesticulación de otras personas”.
“Utilizar el cubrebocas con la ventana trasparente es un apoyo para que nosotros nos podamos comunicar con ellos, pero también, se les facilita saber lo que estamos diciendo”, expresó.
“Si aprendiéramos lenguaje de señas, sería maravilloso para comunicarnos todos”, concluyó.
afcl