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El candidato del PRI al gobierno de Puebla, Alberto Jiménez Merino, afirma que su partido puede ganar la gubernatura ante los conflictos internos en Morena y el PAN, pero, sobre todo, ante el golpeteo que hay entre ellos.

Asegura que el PRI está más vivo que nunca en Puebla y que la unidad de los priistas los llevará a convencer a los poblanos de que no todos son corruptos, por lo que el fantasma de Enrique Peña Nieto y el de gobernadores como Javier y César Duarte no afectará, porque él es un candidato honesto que puede mirar de frente.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Jiménez Merino sostiene que es el candidato de todo el priismo nacional, y no del exgobernador Mario Marín ni de la dirigencia de su partido, además asienta que el priismo que está en el gobierno interino no surgió desde el partido, sino de un Congreso morenista, por lo que no descarta que haya una elección de Estado, aunque confía en que Guillermo Pulido es un respetuoso del Derecho.

Añade que aunque el panorama es adverso, puede darle la vuelta a Miguel Barbosa (Morena), quien ha brincado de un partido a otro por intereses de grupo o personales, pero no por el bien de Puebla.

El ingeniero agrónomo por la Universidad de Chapingo, dice que por su parte no habrá un PRI-MOR ni alianzas en lo oscuro con ese partido.

¿Por qué ser candidato al gobierno de Puebla?

—A lo largo de mi vida nada ha sido fácil, siempre [he estado] en adversidad, y esta es una gran oportunidad de servir a los poblanos.

¿La elección se ve complicada?

—Ciertamente, las estadísticas no nos favorecen, la gente nos dio la espalda en la elección del año pasado; sin embargo, con el trabajo que tenemos de 27 años conociendo Puebla, con resultados y honestidad, creemos que podemos revertir esta situación.

Cuando habla de circunstancias externas ¿se refiere al conflicto interno en Morena y con el PAN?

—¡Claro!, sin duda. Sobre todo porque en el interior Morena trae un pleito en el que se sabandijean, su confrontación es grande, y la gente ya está cansada de que se estén peleando; y en la otra fuerza política (PAN) no se ve un liderazgo. Creemos que esas circunstancias, más el trabajo que podamos hacer, de unir a los priistas y la sociedad, nuestro posicionamiento está en las comunidades.

¿El PRI está vivo en Puebla?

—Tuvo más de 500 mil votos en la pasada elección, más de 80 alcaldes de 217, y tiene una estructura, hay trabajo y por ello podemos ganar.

¿El PRI puede ganar Puebla?

—Para eso me metí, para ganar Puebla, para poder tener una victoria en esta jornada extraordinaria que nadie deseó (...). Ellos solos se están cayendo [Morena], cientos de personas nos han expresado su respaldo y nos han dicho: ‘Estábamos allá, pero ya salió usted y vamos con usted’, porque yo soy el candidato del pueblo.

¿Por qué creer en el PRI después de lo ocurrido con Mario Marín?

—Porque hoy hay un militante leal, preparado, profesionalmente para servir, un poblano de la cultura del esfuerzo, que trae mucho pueblo, que conoce el estado mejor que ninguno de los que van a aspirar, y en función de eso puede dar la confianza necesaria para volver a creer. Yo le puedo quitar votos a Morena y a otras expresiones en función de la confianza que hemos generado en 27 años.

¿El fantasma Enrique Peña Nieto, ya no pesa?

—Creemos que no, sentimos que esa percepción que nos afectó de corrupción en la elección pasada estará aminorada, no todos somos corruptos, habemos más que somos decentes y que podemos ver a los ciudadanos a los ojos de frente.

¿Ve una elección de Estado?

—Espero que no, veo a Puebla muy lastimada. Nosotros haremos un llamado a que haya respeto al proceso electoral, creemos que un priista de cepa que conoce el Derecho, [el gobernador interino Guillermo Pulido], y que yo lo reconozco como respetuoso del Derecho, creemos que va a vigilar que no habrá intervenciones para que el voto se respete.

¿El PRI podría hacer una alianza con Morena en lo oscurito?

—No tenemos ninguna alianza con nadie. Eso del PRI-MOR, es falso, no tenemos más que la indicación de ganar y hacer valer el orgullo priista para poder tener éxito. En 60 años de mi vida nunca me he vendido, y no es esta la ocasión.

¿Quién es el adversario: López Obrador o Miguel Barbosa?

—Es el candidato de Morena, pero no nos preocupa tanto quién está enfrente, porque con el historial de servicio  y honestidad con el que cuento creemos que la gente va a voltear a vernos y nos va a respaldar.

¿Qué opinión tiene de Barbosa?

—Lo he visto de un lado a otro en cuestión de partidos, de repente se alió con el gobierno anterior de Puebla (PAN), luego lo vi en el PRD, ahora en Morena, y yo siempre he reprobado que piensen en función de una conveniencia o grupo; uno debe pensar en función del pueblo. Considero que la lealtad y la trayectoria será reconocida, la vida paga las lealtades.

¿Y de Enrique Cárdenas?

—Es un profesionista respetable, yo le he dicho: ¡bienvenido a esta contienda!, que gane el mejor, y siempre de mí tendrán respeto, porque creo que la gente ya se cansó de que estamos hablando mal uno del otro (...), yo ocuparé mi tiempo en propuestas, no tengo menor intención de recopilar historias negras.

¿Cree necesario que las investigaciones sobre el accidente aéreo se deben saber lo antes posible?

—Es muy importante que salgan lo más pronto posible para que se sepa lo que realmente pasó, y la sociedad y los familiares estén más tranquilos.

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