Tuxtla Gutiérrez.- Un juez vinculó a proceso a dos agentes de la Policía Especializada por el delito de tortura en agravio de Sergio Alberto González Castro , cometido en 2015 en el municipio de La Concordia .
La Fiscalía General del Estado (FGE) indicó que durante la audiencia inicial se realizó la imputación y se expusieron datos de prueba para sustentar la vinculación a proceso.
El Juez de Control del distrito judicial en Villaflores dictó auto de vinculación a proceso en contra de los imputados José Manuel “N” y Alberto “N” por su probable intervención en el delito de tortura en agravio de Sergio Alberto “N”, y otorgó un plazo de 30 días para la investigación complementaria.
El día de su detención, después de que fue sometido a tortura para obtener su confesión, González Castro fue recluido y procesado en el centro penitenciario del municipio de Villaflores.
Tres años después fue absuelto al comprobarse que su aprehensión fue ilegal, ya que no había elementos probatorios para acreditar el delito de abigeato imputado.
El caso González Castro fue documentado por el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), y organismos internacionales contra la tortura solicitaron al juez penal la liberación.
González Castro fue aprehendido y vinculado a proceso. Un juez le impuso una sentencia de seis años. En octubre de 2018, tres años después, fue liberado.
De acuerdo con el seguimiento, denuncias de familiares y el testimonio personal, González Castro fue torturado para auto culparse de robar ganado en el rancho del cantante chiapaneco Julión Álvarez.
El Frayba refirió que según el testimonio de Sergio Alberto, se le privó de su libertad el 5 de noviembre de 2015 en la colonia Benito Juárez, de La Concordia, por policías que derribaron la puerta de la vivienda de su suegra, sin presentar orden de aprehensión.
Amenazaron y golpearon a su esposa y a él ante su hija e hijo menores de edad. Luego lo subieron a una camioneta, le cubrieron la cabeza con una playera y lo golpearon en la espalda, las costillas y la nuca.
Por la noche llegaron a un canal de riego en donde le sumergieron la cabeza repetidas veces.
Más tarde trasladaron a Sergio Alberto a La Concordia donde ante el ministerio público, lo obligaron a firmar papeles en blanco con la amenaza de que "le den una calentadita". "Conocemos tu casa y a tu familia".
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