La consulta indígena que se realiza en Unión Hidalgo, en el Istmo de Tehuantepec , para aprobar la construcción de un nuevo parque eólico , continúa su proceso con la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) e integrantes del Alto Comisionado de las Naciones Unidas como observadores.
El proyecto consultado es la Central "Gunaa Sicarú” de Eólica Oaxaca , filial de la empresa Electicite de France ( EDF ), que se proyecta cuente con 113 aerogeneradores con capacidad para producir 301.9 mega watts de energía.
En la asamblea celebrada este fin de semana en esta población zapoteca, la DDHPO participó como órgano garante, a través de la Visitaduría de Pueblos y Comunidades Indígenas y Afrodescendientes.
La DDHPO informó que entregó una carta con propuestas remitidas por integrantes de la sociedad civil organizada de la comunidad, hacia las autoridades, para que sean tomadas en cuenta durante el proceso que se reinició en noviembre de 2018 y aún continúa.
Como parte de las garantías a los pueblos y comunidades indígenas, se encuentra el uso y aplicación del derecho consuetudinario, el empleo de la lengua, que la consulta sea previa, que no se violente el acceso a la tenencia de la tierra y al uso y disfrute de los recursos naturales; todos estos aspectos son los que se vigila que estén presentes en el proceso que vive Unión Hidalgo.
Para ello, durante la asamblea, las participaciones de los pobladores fueron traducidas del español al zapoteco y viceversa. Los habitantes, que están en proceso de definir el protocolo que habrán de seguir para la consulta, son en 80% hablantes de esta lengua originaria.
Esta es el segundo ejercicio de consulta que realiza el gobierno federal a través de la Secretaría de Energía (Sener) en el Istmo de Tehuantepec para proyectos eólicos, y en los cuales no se considera la que realizó el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) y la Secretaría de Hacienda para el proyecto Interoceánico y el Tren Transístmico, pues no siguieron los mismos protocolos.