Los presuntos responsables del ataque contra miembros de las familias LeBarón y Langford, ocurrido el lunes en Bavispe, Sonora, son miembros de la organización delictiva de La Línea, que forma parte del Cártel de Juárez, y utilizaron armas de procedencia estadounidense, anunciaron ayer autoridades federales.
En conferencia de prensa, en Palacio Nacional, el general Homero Mendoza, jefe del Estado Mayor de la Defensa Nacional, aseguró que una de las primeras líneas de investigación es que La Línea envió una célula a los límites de Sonora y Chihuahua, en la lucha que mantienen contra Los Salazar —del Cártel del Pacífico—, por el control del territorio.
Explicó que se podría establecer la premisa de que no fue una agresión directa contra las familias, puesto que el tipo de camionetas en las que viajan son las mismas que usan los grupos delictivos.
“Son muy comunes [esos vehículos] en las zonas de la sierra como en los que se trasladan delincuentes del crimen organizado, vehículos tipo Suburban. Ahí lo dejamos a que la autoridad investigadora determine si es válida esta apreciación”, dijo.
Sobre los niños que sobrevivieron, indicó que tienen la percepción de que “las personas que agredieron a los ocupantes dejaron ir a los menores”.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, aseguró que las armas que fueron usadas para asesinar a las tres mujeres y seis menores son de procedencia estadounidense.
“En las primeras pesquisas, en la recolección de casquillos, nos permite reconocer el calibre .223 Remington y de procedencia norteamericana, uno de los datos más relevantes”, expuso.
Afirmó que aún no hay detenidos por estos hechos y señaló que la Fiscalía de Sonora ya abrió una carpeta de investigación y que cuentan con el apoyo del gobierno federal para llevar adelante la indagatoria.
Por su parte, el canciller Marcelo Ebrard dijo que espera que estos hechos que afectaron a la familia LeBarón “no sean un foco de desencuentro con Estados Unidos”.