Veracruz.— Las auditorías practicadas al primer año (2017) del gobierno del panista Miguel Ángel Yunes Linares, descubrieron que los funcionarios estatales no lograron demostrar la aplicación de 400 millones de pesos destinados a la entidad para los programas sociales Prospera y Seguro Popular.
El Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) determinó que la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) no pudo demostrar la aplicación de esos recursos.
Los documentos oficiales del Informe General Ejecutivo del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2017 detectaron irregularidades que derivaron en nueve observaciones y cinco recomendaciones, que hacen un total de 14.
Los funcionarios de dicha dependencia no lograron comprobar en las auditorías la aplicación de recursos del programa Prospera, cuyo monto fue de 212 millones, ni del programa Seguro Popular por 217 millones de pesos.
Además, en cuanto a los recursos del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (Fafef), con un techo financiero de 76 millones, y del Fondeo de Aportaciones para los Servicios de Salud (Fassa) con 17 millones, la dependencia dio información y documentación incompleta.
El órgano también halló que funcionarios de la SSP local retuvieron durante 2017 un total de 120 millones de pesos por concepto de cuotas obrero patronales, pero los recursos no fueron depositados ni al Seguro Social, ni a pensiones, ni al fondo de retiro de sus empleados.
Además, la auditoría detectó diversas irregularidades financieras en la Secretaría de Salud, sobre todo, en cheques magisteriales por más de 320 millones de pesos, y hasta aviadores en centros educativos.