En Puebla, nos comentan, continúa en aumento el conflicto entre la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y el gobierno estatal, luego de que el Consejo Universitario acusara una persecución política contra el rector Alfonso Esparza Ortiz, quien indicó que no dejará el cargo y retó a que si hay pruebas en su contra por presuntas irregularidades se presenten o dejen de amenazarlo. Nos dicen que la administración estatal le respondió con un comunicado en el que rechazó una persecución política e indicó que “autonomía no significa aislamiento, ni actuar al margen del ordenamiento jurídico”. Saquen las palomitas, pues parece que el pleito va para largo.
Nos cuentan que en Zacatecas quien ya le entró a la moda de las rifas es el alcalde de Tlaltenango, Miguel Ángel Varela Pinedo (PAN), pues anunció que hará un sorteo el 19 de diciembre, en el que el premio será una motocicleta Yamaha que presuntamente le regaló un migrante, pero “no es su estilo”. Nos relatan que don Miguel mandó a imprimir 2 mil boletos, de los cuales el cachito tendrá un costo de 50 pesos y lo que recaude en la rifa lo duplicará y servirá para comprar juguetes para niños de escasos recursos. Sin embargo, algunos cuestionan si tiene permiso de la Segob para el sorteo y si está usando recursos públicos para la rifa. ¿Será plan con maña para alguna diputación?
Desde San Luis Potosí, nos platican que a más de uno dejó con el ojo cuadrado el secretario de Gobierno, Alejandro Leal Tovías (PRI), durante su comparecencia en el Congreso del estado, pues al ser cuestionado sobre la inseguridad pública en la entidad se soltó como hilo de media a culpar a la Federación por la falta de coordinación y hasta aseguró que la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) no estaba haciendo su trabajo porque no informaba sobre las investigaciones o de su labor de campo. Nos cuentan que sus detractores alertaron que los potosinos tendrán que resignarse a que la delincuencia haga de las suyas, pues las autoridades ya sólo esperan el fin de su periodo. ¡Qué pena!
En tiempos de fieles difuntos, nos platican que en Morelos están reviviendo los “muertos políticos” para participar en los comicios del próximo año y desde esta semana andan en reuniones como en los viejos tiempos, para hablar de sus proyectos. Nos dicen que es el caso de Francisco Moreno Merino (PRI), recordado por una declaración misógina en la Cámara de Diputados que le costó un escaño en el Senado en 2012 y que ahora busca ser candidato a la alcaldía de Cuernavaca, pero al parecer la tendrá difícil, pues nunca ha ganado una elección de mayoría, además de que su partido no ha ganado la capital del estado desde 1997, por lo que varios le recomiendan pensarlo dos veces. ¡Ups!